Sentir que una espina de pescado se ha quedado atrapada en la garganta puede causar una gran incomodidad y de inmediato generar preocupación. Aunque muchas veces no supone un problema grave, las molestias que provoca pueden ser persistentes y generar ansiedad en la persona afectada. El enfermero Jorge Ángel ha compartido en TikTok una serie de recomendaciones para reaccionar correctamente si esto ocurre y evitar complicaciones.
En primer lugar, es fundamental destacar que una espina de pescado en la garganta no suele afectar la respiración, por lo que el riesgo inmediato de asfixia es bajo. Sin embargo, las sensaciones de irritación y dolor resultan molestas y es importante saber qué acciones tomar para intentar extraerla o aliviar el síntoma de forma segura.
Según ha explicado este profesional sanitario, la reacción inicial debería ser intentar toser suavemente para facilitar la expulsión natural de la espina. Este método es el más simple y menos invasivo, además de ser seguro y efectivo en muchos casos.
Procedimientos recomendados para aliviar la sensación de espina atorada
Si toser no resulta efectivo, la siguiente recomendación es tomar un pequeño traguito de agua para intentar desplazar la espina hacia abajo. El líquido puede ayudar a que la espina se mueva si se encuentra parcialmente alojada en la zona superior de la garganta.
Cuando estas dos primeras acciones no surtan efecto, el enfermero aconseja un método casero tradicional: tomar una cucharada de aceite de oliva. Este aceite puede facilitar el deslizamiento y lubricar la zona afectada. Además, el aceite de oliva es un recurso habitual para aliviar molestias digestivas y de garganta.
Otro recurso muy recurrido consiste en comer un pequeño trozo de pan, preferiblemente formando una bola con el propio alimento y tragándola para captar la espina y lograr removerla. El pan actúa como una especie de vehículo que puede atrapar la espina y facilitar su desplazamiento. En una línea similar, el arroz cocido es también muy usado para estos casos por su textura que ayuda a capturar pequeños objetos alojados en la garganta.
Prácticas desaconsejadas y posibles riesgos
Existen acciones que se deben evitar para no agravar la situación. El enfermero alerta especialmente sobre no usar pinzas ni otros objetos para intentar extraer la espina a menos que esta sea visible y accesible. Hacerlo puede dañar las paredes sensibles de la garganta y causar lesiones graves.
Además, no se recomienda introducir los dedos en la boca para provocar vómitos con la intención de desalojar la espina, ya que esta maniobra puede irritar aún más la zona y no garantiza resultados positivos.
Recordemos que la garganta es una zona muy delicada y la introducción de objetos extraños puede derivar en infecciones o inflamaciones que compliquen el cuadro inicial.
Otro experto en las RRSS... ¿Quién se pondría su bata de trabajo en casa? Además, mi sobrino casi se muere por una espina de pescado...