Con la llegada del mes de diciembre, las celebraciones navideñas están experimentando un cambio notable. Y es que, este año, un personaje entrañable de Estados Unidos está ganando terreno en miles de hogares españoles, desbancando en popularidad a esta costumbre centenaria: el elfo travieso.
Este pequeño ayudante de Papá Noel se ha convertido en un fenómeno viral e inesperado que está transformando la manera de vivir la magia de diciembre en España. Al igual que el calendario de adviento, que se extiende desde el 1 hasta el 24 de diciembre, el elfo aparece coincidiendo con la llegada del Adviento, aunque con un toque mucho más dinámico y divertido. La ilusión y la expectativa que genera en los niños es tan grande como la del tradicional calendario, si no más.
Se trata de una figurita que irrumpe en los hogares sin aviso, dotada de un carácter juguetón y travieso. Pero, ¿Qué secretos esconde este curioso personaje que está ganando adeptos tan rápidamente en España?
Historia y significado del elfo travieso
El elfo travieso es un personaje inspirado en la tradición nórdica y fue popularizado en países anglosajones hace varias décadas. No obstante, su llegada a España ha sido reciente, pero intensa. La esencia del elfo es la de un ayudante de Papá Noel que acompaña y supervisa a los niños durante el mes de diciembre, informando a Santa Claus sobre su actitud y comportamiento.
El momento en que hace su aparición es crucial: el 1 de diciembre de 2025, fecha en la que muchas familias lo reciben con una carta personalizada para que los pequeños lo adopten, estableciendo así un vínculo mágico y lleno de ilusión. Desde ese instante, el elfo utiliza la noche para «viajar» al Polo Norte y contarle a Papá Noel cómo se han comportado los niños, lo que influye directamente en la lista de regalos de Nochebuena.
Además de vigilar y comunicarse con Santa, este elfo es también el encargado de llenar las mañanas con sorprendentes travesuras creativas: puede dejar un rastro de harina en forma de ángel simulando nieve, esconderse en la nevera tras derramar un refresco o colgarse de las luces del árbol de Navidad, entre múltiples bromas que estimulan la imaginación y las risas de toda la familia.
Una de las advertencias más comunes sobre este fenómeno es que el elfo pierde su poder mágico si alguien lo toca. Este detalle, que para muchos niños añade un componente de responsabilidad y cuidado, también ha generado cierta inquietud entre padres y educadores.
Cuando el elfo es tocado accidentalmente, deja de ser un ser mágico y se convierte en un simple adorno navideño sin capacidad de viajar al Polo Norte ni causar sus famosas travesuras. Sin embargo, existe una solución en tres pasos para devolverle la magia, que suele involucrar actos simbólicos y de convivencia familiar para reactivar la ilusión y el vínculo con el personaje.
A Mallorca existeixen els dimonis boiets que fan dolenties si no els donen feina i els tenim tot l'any no just per Nadal. A les rondalles hi ha molts d'exemples del que fan.