Las formaciones nacionalistas catalanas y vascas han visto la intervención del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, más como un mitin interno para «la parroquia» o una moción de censura que como el discurso de un candidato a presidente del Gobierno. «Parece una moción de censura», ha dicho el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, al término del discurso de Feijóo, una opinión en la que ha coincidido el portavoz de EH Bildu, Oskar Matute.
Para Matute, además de la «moción de censura encubierta» lo que ha quedado claro es que al líder del PP se le paró el reloj en 1978. Ha señalado que el discurso del candidato del PP ha estado trufado de «bulos y mentiras» y se ha preguntado cómo encajarán las propuestas que ha hecho en los responsables de las comunidades donde gobierna su formación, como es el caso de la gratuidad de las escuelas infantiles de cero a tres años.
«Feijóo ha arrancado su discurso a ninguna parte acompañado de todas las derechas», ha agregado el portavoz de EH Bildu, a quien le ha llamado la atención el anuncio sobre la inclusión de un nuevo delito de deslealtad institucional.
Por último, ha asegurado, ante las afirmaciones de Feijóo de que podría haber tenido el apoyo de la cámara si hubiese cedido a las exigencias de los independentistas, que los votos de Bildu no los tendría en ningún caso.
El portavoz del PNV, Aitor Esteban, ha considerado que el discurso de Feijóo no ha sido para «buscar votos», sino que ha consistido «más bien en una especie de primer mitin de una supuesta, posible campaña electoral». «Ha sido un discurso más dirigido a la parroquia interna dando por pasada esta pantalla de la investidura», ha añadido.
Además, ha expresado su sorpresa por las «autoenmiendas» que Feijóo ha hecho a determinadas políticas del PP y le ha reprochado que diga que tiene sensibilidad a lenguas «pero ha calificado de karaoke que se pueda hablar en euskera en el Congreso». Por su parte, el diputado del BNG Néstor Rego, ha visto el discurso de Feijóo como «populista» y con «muy poca credibilidad» sobre todo porque «sabe que no va a tener que cumplir los compromisos que ha adquirido hoy».
«Estamos hablando de un discurso de cara a la galería y para reforzarse internamente en el PP», ha dicho Rego tras incidir en que su intervención está cargada de «mentiras» ya que se ha comprometido con la Sanidad pública «cuando en Galicia la precarizó» y ha lamentado que no mencionara ningún compromiso concreto con esa comunidad autónoma.