El Senado ha aprobado este martes una moción propuesta por el Grupo Popular por la que se declara en contra de una negociación para la investidura del presidente que tenga como contrapartida una amnistía, una propuesta que el PSOE considera «antigua y vieja» y que no refleja la realidad de España.
La moción, aprobada con los votos del PP, Vox y UPN, insta al Gobierno en funciones a «garantizar los principios constitucionales y, frente a la política chantajista de los independentistas, y propone recuperar la política de acuerdos de Estado entre las principales fuerzas políticas de ámbito nacional». Además, proclama el imperio de la ley y la igualdad de todos los ciudadanos, por lo que reprueba cualquier negociación política que incluya «como contrapartida la concesión de una amnistía expresa o velada» o cualquier tipo de indulto o beneficio judicial.
Según ha explicado el PP en la justificación de la moción, en cualquier democracia europea, la exigencia de «proceder a dinamitar el Estado de Derecho como paso previo o elemento nuclear de una negociación», sería «inmediatamente descartada, como una condición inasumible para formar gobierno, por cualquier partido político democrático».
Por contra, el presidente del Gobierno en funciones ve su investidura como «cosa hecha» y ha iniciado ya un «opaco proceso de negociación» para la presentación de una proposición de Ley en el Congreso de los Diputados «que dé satisfacción al trágala impuesto por Carles Puigdemont».
En defensa de la moción, el senador del PP Antonio Silván ha argumentado que aprobar una ley de amnistía supondría que es «el propio Estado el que se deslegitima a sí mismo y supone un fraude a los ciudadanos y un ataque al Estado de Derecho». Por contra, la portavoz del PSOE, Eva Granados, ha considerado que la propuesta del PP es «la demostración de la causa de la derrota de Alberto Núñez Feijóo: no conocer la España de 2023».
«Es una moción antigua, vieja», justo en el momento en que «se abre un nuevo tiempo en nuestro país en el que el diálogo es el método y la Constitución el marco de toda negociación», ha asegurado. También para el senador de Junts per Cat Josep Lluís Cleries se trata de una «una moción en blanco y negro con música del No-Do de fondo» cuando lo que se necesita es un «pacto histórico que reconozca que Cataluña es una nación».
Así ha considerado que es una «moción de perdedores» que solo busca que el candidato a la investidura «no pueda pactar con nadie, que renuncie a ser presidente». Por su parte, la representante de UPN. María Mar Caballero ha adelantado que apoyaría la moción por considerar que en cualquier negociación «hay unas líneas que no se deben cruzar», pero ha subrayado que lo que de verdad la preocupa es «que nada se sepa de lo que están negociando con Batasuna» para lograr su apoyo en la investidura.