Vox celebró este sábado su primer acto público en Menorca con total normalidad pese a la llamada de la Plataforma Antifeixista a concentrarse y boicotear la presentación de los candidatos en el Club Nàutic de Ciutadella. Cerca de 60 personas asistieron al encuentro político en el aula del club, convocatoria que motivó un importante despliegue de policía, al menos para lo que suelen ser este tipo de acontecimientos en Menorca.
Desde mucho antes de que se iniciara el acto los agentes locales y nacionales vigilaron los accesos al club; el coordinador insular Antoni Camps y simpatizantes de Vox de la Isla llegaron con antelación, y el dirigente balear, Jorge Campos, lo hizo pasadas las siete de la tarde y entró al club sin que el grupo de manifestantes, que se habían movilizado sobre todo en redes sociales, hubiera hecho aún acto de presencia. Más tarde alrededor de 20 personas se reunieron fuera, al otro lado de las vallas, portando dos pancartas en las que se podía leer «Gritaremos hasta quedarnos sin Vox» y «A més opressió més reflexió», pero lo cierto es que no se oyeron gritos ni consignas a la entrada de los simpatizantes del partido de Abascal. Preguntados por su presencia, algunos de los manifestantes afirmaron que el despliegue policial era «desproporcionado, nos gustaría saber cuánto ha costado» y argumentaron su protesta afirmando que «en Menorca no toleramos el racismo» y añadieron que «nos preocupa que gente de 60 o 70 años decida nuestro futuro porque dejaremos a nuestros hijos una sociedad racista, xenófoba y homófoba».
Dentro del Club Nàutic abrió el turno de intervenciones Malena Contestí, la candidata al Congreso, que empezó en mallorquín y a petición de algunos presentes procedentes de Madrid continuó en castellano. Contestí precisamente rechazó las críticas de xenofobia, «no dejéis que os pongan esa etiqueta», dijo a los presentes, un público heterogéneo en edades, reducido pero entregado. Por su parte, Jorge Campos se refirió a la última polémica, la de las armas, y afirmó que el partido defiende «reforzar la legítima defensa». También lanzó un dardo al PP y aseguró que «votar a Vox no es votar a Sánchez» sino que es, añadió, el verdadero voto útil. El menorquín Antoni Camps lanzó ya algunas propuestas para la Isla, entre ellas, desdoblar la carretera general, «los del GOB que vayan en el segundo carril»; modificar un Plan Territorial «totalitario»; y «eliminar las subvenciones a los chiringuitos de la izquierda».
gracias , anda que el tuyo , MAC , jajajaja