Un vuelo que salía de la ciudad alemana de Stuttgart en dirección a Lisboa ha tenido que ser detenido poco antes de despegar este viernes porque un trabajador del aeropuerto descubrió que el copiloto del avión estaba borracho, según ha informado la Fiscalía de la ciudad.
El trabajador del aeropuerto de Stuttgart informó a la guardia de seguridad que e seguida determinaron que el piloto, de 40 años, no se encontraba en condiciones de volar. Ha sido detenido con una fianza de 10.000 euros. También se le ha retirado la licencia de vuelo, de acuerdo con la Policía.
Los 106 pasajeros del vuelo han tenido que ser trasladados al hotel porque la aerolínea ha sido incapaz de conseguir otra tripulación con tan poco tiempo.