Los incendios que están teniendo lugar en Australia se han saldado ya con la vida de 24 personas y cuatro bomberos más han resultado heridos en los más de 200 incendios activos en los estados australianos de Nueva Gales del Sur y Victoria, que han arrasado tres millones de hectáreas en el último mes.
En este contexto, el primer ministro de Australia, Scott Morrison, ha anunciado este domingo la creación de una agencia nacional para la recuperación del país tras los devastadores incendios forestales que estará dirigida por el excomisionado de la Policía Federal australiana, Andrew Colvin, según ha informado el periódico 'Sydney Morning Herald'.
Morrison ha subrayado que la agencia utilizará una «serie de medidas de apoyo», entre las que se encuentran pagos para ayudar a los pequeños empresarios para recuperar las infraestructuras que se han visto afectadas, además de asistencia para eliminar los cadáveres de animales a causa de los incendios.
Por otro lado, el primer ministro ha asegurado que aunque se «han echado muchas culpas» es el momento de centrarse en la respuesta a los incendios. «Mucha gente me ha culpado a mí, a los Verdes... La culpa no ayuda a nadie en estos momentos y el análisis excesivo de estos asuntos no es un ejercicio productivo. La actuación apropiada en este momento es caminar juntos», ha expresado.
Además, ha subrayado que considerará la creación de una comisión sobre la crisis de los incendios junto a «estados y territorios», aunque ha insistido en que la prioridad actual es acabar con ellos.
Morrison ha señalado también que no hay «duda» en el país sobre el cambio climático y que dentro de sus efectos también se incluye el impacto en Australia.
Por su parte, la reina Isabel II de Inglaterra se ha mostrado «profundamente triste» por el desarrollo de los incendios en Australia y ha ensalzado este sábado la tarea que trabajadores de emergencias que están actuando en la zona.
«Mis agradecimientos van para los servicios de emergencia y para todos los que ponen sus vidas en peligro para ayudar a las comunidades que lo necesitan», ha expresado la reina en declaraciones en Buckingham Palace, recogidas por la agencia de noticias DPA.
La situación en Australia se ha visto agravada después de que el frente cálido haya rebasado todas las expectativas. Entre los vientos de más de 100 kilómetros por hora y los 48ºC que se han llegado a alcanzar en localidades como Penrith, los fuegos han comenzado a comportarse «de forma errática» hasta el punto que los bomberos solo han podido dirigirlos a zonas seguras.
Además, al menos seis personas siguen desaparecidas en Victoria, donde hay al menos 50 incendios en curso. En Nueva Gales del Sur, las autoridades están intentando despejar un área de 14.000 kilómetros, con cinco «zonas prohibidas».