Un vertido provocado por una fuga de gas o crudo, pendiente de investigación, ha obligado a las autoridades israelíes a cerrar toda sus playas este domingo, según ha informado el Gobierno israelí.
«Es de lo peor que he visto, ha lamentado el director de la Autoridad Nacional de Parques y Naturaleza, Shaul Goldstein, en comentarios recogidos por la radio pública israelí.
«Todas las playas están afectadas. La limpieza va a tardar meses, si no más tiempo», ha lamentado.
Decenas de animales han sido hallados sin vida a lo largo de los 160 kilómetros de costa mientras las autoridades evalúan el alcance de la mancha, que podría haber resultado del paso de un carguero. Una tormenta habría arrastrado la mancha hasta las playas del país.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha evaluado el impacto de la mancha en la ciudad portuaria de Ashdod, en el sur del país, mientras la población ha comenzado a participar en labores de limpieza de este 'chapapote'.