El presidente de Ucrania, Vlodimír Zelenski, se ha dirigido a sus conciudadanos este sábado en un vídeo difundido en Facebook. En un emotivo mensaje de resistencia y unidad, el mandatario ha hecho un llamamiento a un alto al fuego al ejército ruso. «Las tropas rusas impiden que llegue la ayuda a la población civil», ha lamentado. Ha pedido que Moscú garantice «el silencio» de sus tropas para poder evacuar a los civiles de unas 15 ciudades.
Aún así, ha lanzado un mensaje de ánimo a los ucranianos: «Estamos teniendo un éxito extraordinario. La resistencia de los ucranianos está haciendo historia. No importa cuán difícil sea. No podemos bajar la guardia. EL enemigo está trayendo más y más columnas a territorio Ucraniano. Están tratando de ganarnos en número, pero estoy seguro de que no lo conseguirán. Voy a trabajar por ello».
Parte de guerra
También ha aprovechado el discurso para dar el último parte de guerra: Ucrania admite entre sus filas 1.300 soldados muertos. Eso sí, ha intentado paliar la cifra con la de las bajas en el bando enemigo: «Las pérdidas en las filas rusas son colosales. Se puede decir que es el mayor golpe contra la armada rusa en décadas», ha sentenciado Zelenski.
El presidente ucraniano ha hecho gala del daño causado al ejército de Moscú. Desde el inicio de la invasión, hace 17 días, 31 batallones rusos «han perdido capacidad de combate» y ha asegurado, tajante, que «los militares rusos están siendo capturados, no en solitario, sino en grupos». En cuanto a daños armamentísticos, Zelenski ha cifrado en 360 los tanques, más de 1.200 los vehículos, 60 aviones y 80 helicópteros destruidos. «El ejército ruso nunca había perdido tanto en tan poco tiempo», ha apuntillado el presidente ucraniano.
Corredor humanitario en Mariúpol
Sobre todo preocupa la situación de Mariúpol, una de las ciudades más importantes, de unos 500.000 habitantes. Ahora mismo se encuentra sitiada por el ejército ruso, bajo bombardeos constantes, sin agua y sin conexión a internet.
Zelenski ha pedido un alto al fuego al ejército ruso para poder establecer un corredor humanitario y facilitar, tanto la evacuación de civiles, como la llegada de la ayuda humanitaria. «El ejército ucraniano respetará 'el silencio' durante toda la ruta para que Marúpol reciba alimento, agua y medicina y para que los ciudadanos puedan ir a áreas seguras», ha prometido el mandatario, que asegura que están trabajando para abrir corredores en las ciudades de Kiev, Makariv, Borodyanka, Trostyanets, Sumy, Poltava, Lebedyn, Konotop, Velyka Pysarivka, Krasnopillya, Polohy, Tokmak, Hostomel, Kozarovychi, Mykulychi y Andiivka.
El alcalde de Melitopol, secuestrado
Zelenski también se ha referido al secuestro del alcalde de la ciudad ucraniana de Melitopol, Ivan Fedorov, secuestrado este viernes supuestamente por soldados rusos.
Los ciudadanos de la ciudad han protagonizado una protesta, de cerca de 2.000 personas, para exigir a los rusos la liberación de su alcalde. Zelenski ha agradecido la «resistencia» de los ciudadanos y los ha puesto de ejemplo para pedir a los rusos que salgan a la calle contra la invasión: «¿Lo oyen, Moscú? Dos mil personas han protestado contra la ocupación de Melitopol, ¿cuántas podrían ser en Moscú contra la guerra?». Ha añadido que está manteniendo contacto con líderes internacionales para pedir a Rusia la liberación de Fedorov.
La vía del diálogo, sin avances
De momento, las negociaciones entre ambas potencias parece que se retomarán en Jerusalén (Israel), tras el visto bueno al encuentro por parte de Zelenski. A pesar de ello, ni el presidente francés Emmanuel Macron ni el presidente ni el canciller alemán, Olaf Scholz, se muestran esperanzados en la vía del diálogo. Aseguran que Putin no tiene por ahora intención de «parar la guerra». Han denunciado que el presidente ruso «no respeta sus compromisos» y han alertado de que planean aplicar sanciones aún más duras contra Rusia.