La Unión Europea ha apuntado este martes a seguir aplicando sanciones contra el sector energético y ha planteado medidas contra el petróleo ruso después de proponer un embargo al carbón, en respuesta a la masacre de civiles en Bucha y otras localidades a las afueras de Kiev. En un debate en el pleno del Parlamento Europeo centrado en la última reunión del Consejo Europeo, el presidente de dicha institución, Charles Michel, ha incidido en que después de las medidas propuestas para cortar el suministro de carbón, las sanciones al petróleo y al gas «serán necesarias tarde o temprano» para romper con la dependencia de combustibles fósiles de Rusia.
«Esta guerra nos abre ojos ante necesidad de fomentar soberanía», ha recalcado el ex primer ministro belga, que ha enfatizado los líderes europeos se han comprometido a reforzar la soberanía alimentaria y energética.
En su intervención, el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, ha defendido la respuesta europea a la invasión rusa, asegurando que supone llevar a la práctica los planes para disminuir la dependencia energética. «Hoy acabamos con el carbón, pero es una parte muy pequeña de la factura», ha apuntado Borrell ante los eurodiputados, sugiriendo que harán falta más medidas contra el sector energético ruso.