Al menos 56 muertos por deslizamientos de tierra e inundaciones causadas por la primera tormenta tropical del año, bautizada como 'Megi', que ha azotado Filipinas en las últimas tres jornadas, según han informado las autoridades del país. En concreto, se han recuperado 47 cuerpos en la ciudad de Baybay, en la provincia de Leyte, a 599 kilómetros al sureste de Manila, donde se han denunciado también 27 desaparecidos, tal y como han informado los servicios de emergencia.
Dos personas han perdido la vida como consecuencia de los deslizamientos de tierra en la cercana ciudad de Abuyog, mientras que siete personas han fallecido ahogadas por las inundaciones en las provincias de Negros Oriental, Dávao Oriental, Dávao De Oro y Samar. Además, cerca de 200 personas han resultado heridas por los deslizamientos de tierra y las inundaciones, mientras que una persona más ha sido dada como desaparecida en la provincia de Dávao De Oro, según los funcionarios locales. La tormenta tropical Megi ha azotado la costa oriental de Filipinas este domingo, trayendo lluvias torrenciales. Desde entonces se ha debilitado, pero se ha movido lentamente, por lo que las lluvias no se han detenido.
«Las inundaciones todavía se experimentan en todas las aldeas bajas», ha dicho el jefe de la agencia de desastres de Baybay City, Rhyse Austero, agregando que «la lluvia ininterrumpida también es un gran desafío» para las operaciones de búsqueda y rescate. Más de 60.300 residentes se han visto obligados a huir de sus hogares en las zonas afectadas por la tormenta tropical 'Megi', según ha dicho la Agencia Nacional de Desastres. El archipiélago filipino es azotado por un promedio de 20 ciclones tropicales cada año. El tifón más fuerte que ha azotado Filipinas fue el supertifón Haiyan, que mató a 6.300 personas y desplazó a más de 4 millones en noviembre de 2013.