El aeropuerto londinense de Heathrow anunció que ha introducido desde este martes un límite de 100.000 pasajeros diarios que podrán pasar por sus terminales hasta el 11 de septiembre, a fin de poder hacer frente a la gran demanda de viajes. Las aerolíneas planeaban operar vuelos con una capacidad diaria promedio de 104.000 asientos durante ese período, según Heathrow. Según precisó el aeropuerto, se ha pedido a las aerolíneas que dejen de vender billetes de verano para limitar el impacto que la fuerte demanda pueda tener en los pasajeros.
El consejero delegado de Heathrow, John Holland-Kaye, señaló hoy que en las últimas semanas se ha observado que el número de pasajeros que pasan por las terminales ha superado regularmente los 100.000 por día. Esto ha provocado problemas, como largas filas, retrasos para los pasajeros que requieren asistencia, maletas que no viajan con los pasajeros o que llegan tarde, baja puntualidad y cancelaciones de última hora, indicó Holland-Kaye.
"Nuestros colegas están haciendo todo lo posible para sacar a la mayor cantidad de pasajeros posible, pero no podemos ponerlos en riesgo por su propia seguridad y bienestar", agregó. Heathrow había informado ayer de que ha pedido a las aerolíneas que cancelasen el lunes 61 vuelos ante la imposibilidad de gestionar el alto número de pasajeros que transitan por sus instalaciones. Una portavoz oficial había explicado que las terminales tres y cinco del aeropuerto estimaban la llegada de un número de usuarios "mayor del que permite su capacidad", por lo que ha pedido a "algunas" compañías que cancelasen un "total combinado de 61 vuelos".