El almirante Ben Key, jefe del Estado Mayor de la Marina británica, ha ordenado una investigación inmediata de las denuncias sobre las «aberrantes» prácticas de acoso sexual de la que han sido objeto durante años las mujeres, en especial las reclutas, durante el servicio, reveladas por el diario Daily Mail. A las denuncias de agresión se suma la existencia de listas donde las reclutas figuran según el orden en el que deberían ser violadas en caso de un «evento catastrófico».
Las denuncias también señalan a oficiales de la Marina como responsables de hacer «gestos y comentarios sexuales» hacia el personal femenino. Algunas reclutas también han denunciado haber recibido golpes con portapapeles. «Estoy profundamente consternado por estas alegaciones», ha hecho saber el almirante Key en su cuenta de Twitter, y quiero garantizar a nuestra gente y a cualquiera que lea esto que cualquier actividad de este tipo, tan distante del más alto estándar de la Marina Real es, en sí misma, totalmente inaceptable".
«Estas alegaciones son aberrantes. El asalto sexual y el acoso no tienen cabida en la Marina y no serán tolerados», ha añadido antes de garantizar que ha dado instrucciones «para investigar a fondo» las denuncias. «Cualquier persona que se ha hallada culpable será hecha responsable de sus acciones sin importar su graduación», ha asegurado el almirante.
FernandoLady D ha muerto en París, la investigación se ha llevado a cabo allí. ¿No le quepa la menor duda que haya podido morir escapando de los paparazzi? Tiene datos que los demás no tenemos? El príncipe Andrea ha manchado el nombre de la casa real por sus frecuentaciónes y no por haber cometido delitos. Ha sido apartado de inmediato de la vida pública y de los focos de los medios de información. ¿De verdad no le recuerda a alguien más cercano a nosotros? Lo que usted llama cinismo es puro pragmatismo. Algo de que los mediterráneos carecemos. Allí he visto personalmente va un jefe despedir a su hermano, por repetido absentismo laboral, sin que ello modifique el amor que se tienen. Separan muy bien lo laboral de lo familiar y las amistades y no hay millones de cortijos y chiringuitos cómo estamos acostumbrados aquí. Quién no rinde viene evaluado por los resultados. Si hay algo que deberíamos copiarle es justamente esto. Le recuerdo que hablamos de un país donde han dimitido ministros por comprar una peli para adultos en un hotel usando la tarjeta del ministerio o, más recientemente, para montarse fiestas en pleno confinamiento. Más o menos el Hay Bar, pero con dimisiones por consecuencia.