Un niño de 13 años ha sido rescatado con vida este lunes tras haber estado 182 horas atrapado entre los escombros de un edificio en la provincia de Hatay, que se derrumbó el lunes pasado debido a los dos grandes terremotos que devastaron el sureste de Turquía, y que han dejado más de 31.000 en este país y otros 3.500 en Siria.
El rescate del pequeño Kaan, mostrado en directo por la emisora Halk TV, es uno de los que se siguen produciendo con cuentagotas entre los miles de edificios que se vinieron abajo, y entre los que algunos expertos estiman puede haber aún hasta 155.000 cuerpos.
Este lunes Catar ha donado los barracones y casas móviles utilizados para el Mundial de fútbol a las zonas afectadas por el terremoto de Turquía y Siria, donde acogerán a las personas que se han quedado sin hogar, según declaró este lunes a Reuters un funcionario qatarí. Un barco con las primeras 350 unidades partió de Qatar rumbo a Turquía este pasado domingo, según esta fuente.
El estado árabe del Golfo Pérsico se ha comprometido a enviar 10.000 viviendas móviles a las zonas afectadas por el terremoto, según informó el Fondo Catarí para el Desarrollo en un tuit el domingo. «En vista de las necesidades urgentes en Turquía y Siria, hemos tomado la decisión de enviar nuestras cabinas y caravanas a la región, proporcionando un apoyo muy necesario e inmediato a la población de Turquía y Siria».