Algunos de los invitados a la coronación del rey Carlos III han empezado a llegar este sábado a la Abadía de Westminster, donde se celebrará la formal ceremonia, cuyo comienzo está previsto para las 11.00 hora local (12h hora española). Ataviados con uniformes militares, trajes religiosos o medallas, los invitados empezaron a ocupar sus lugares en el templo religioso, después de que las fuerzas de seguridad hicieran un registro de la abadía y sus alrededores con perros entrenados.
A esta coronación, la primera que tiene lugar en Londres en 70 años, han sido invitadas 2.300 personas, entre ellos reyes y reinas, como los de España, Felipe VI y Letizia, así como otros jefes de Estado y representantes de países de la Mancomunidad Británica de Naciones (antiguas colonias) y de los países con los que el Reino Unido mantiene plenas relaciones diplomáticas. Se espera la presencia del presidente de Francia, Emmanuel Macron; los reyes de los Países Bajos, Guillermo-Alejandro y Máxima, así como la primera dama de EEUU, Jill Biden. Además, muy cerca del palacio de Buckingham y frente al monumento de la reina Victoria han empezado a llegar invitados para ocupar una tribuna especialmente construida. Estos invitados son trabajadores de la sanidad pública británica. La coronación será un acto formal y simbólico, ya que el reinado de Carlos III, de jure y de facto, empezó el 8 de septiembre de 2022, a la muerte de su madre, la reina Isabel II.
Durante la ceremonia religiosa, Carlos III será coronado frente al altar mayor con la suntuosa corona de San Eduardo, la única vez que el monarca la llevará en su vida ya que está reservada para la coronación y permanece siempre en la Torre de Londres. Además, ubicado en la silla de San Eduardo, Carlos III será ungido con el óleo consagrado, un acto que no se realiza a la vista de la congregación y que simboliza la bendición del monarca. Después de Carlos III, Camila también será coronada y, una vez concluida la ceremonia, será llamada reina en vez de reina consorte.