El Gobierno irlandés informó este viernes de que estudia la posibilidad de etiquetar cada cigarrillo incluido en las cajetillas con una advertencia sobre los riesgos que presenta el tabaco para salud. El ministro irlandés de Salud, Stephen Donnelly, confirmó que su departamento podría seguir así el ejemplo de Canadá, el primer país del mundo que adoptará esta medida sanitaria a partir de finales de este año.
Las advertencias, explicó el titular del ramo, podrían inscribirse en las colillas de los cigarrillos, en cigarros puros pequeños y «en otros productos de tabaco». «Sabemos que los canadienses lo están haciendo, así que nos mantendremos en contacto con ellos para ver qué impacto tiene», declaró Donnelly.
El ministro recordó que Irlanda es visto como «un líder» en la lucha contra esta adicción y en la reducción de la «tasa de fumadores», después de convertirse en 2004 en el primer país del mundo que prohibió el tabaco en todos los lugares públicos, como paso inicial hacia el objetivo de lograr una «sociedad libre de humo» para 2025.
«Todo lo que hacemos es en el contexto de los avances para la sanidad pública», agregó el titular de Salud en el Ejecutivo de Dublín, de coalición entre democristianos, centristas y verdes. Donnelly subrayó que el tabaco causa más de 4.500 muertes cada año en este país y que la población fumadora, de en torno al 18 %, sigue siendo «demasiado alta».
A este respecto, el Gobierno irlandés ya confirmó el pasado mes que introducirá en los próximos meses una ley que prohíbe la venta de productos de vapeo a los menores de 18 años. Un estudio efectuado recientemente en escuelas irlandesas reveló que el 9 % de alumnos de entre 12 y 17 años y el 15,5 % de 15 y 16 años usan cigarrillos electrónicos o vapeadores. Asimismo, constató que los menores que vapean multiplican por cinco la posibilidad de convertirse en fumadores.