El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) ha denunciado este martes que más de 400 niños palestinos mueren o resultan heridos cada día por los bombardeos de Israel contra la Franja de Gaza, en el marco de la guerra abierta entre el Ejército israelí y el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás). «En los últimos 18 días, la Franja de Gaza ha sido testigo de un devastador número de víctimas menores de edad: se han notificado 2.360 muertos y 5.364 heridos debido a los incesantes ataques, es decir, más de 400 niños mueren o resultan heridos a diario», reza un comunicado.
La directora regional de UNICEF para Oriente Próximo y el norte de África, Adele Khodr, ha aseverado que «la situación en la Franja de Gaza es una mancha cada vez mayor» en la conciencia colectiva, debido a que el balance de víctimas menores de edad es «simplemente asombrosa». «Aún más aterrador es el hecho de que, a menos que se alivien las tensiones y a menos que se permita la ayuda humanitaria, incluidos alimentos, agua, suministros médicos y combustible, el número diario de muertes seguirá aumentando», ha señalado, remarcando que «sin acceso humanitario las muertes por ataques podrían ser la punta del iceberg».
En este sentido, ha señalado que la cifra de fallecidos aumentará exponencialmente si las incubadoras empiezan a fallar, si los hospitales cierran sus puertas, si los niños siguen bebiendo agua contaminada y no tienen acceso a medicamentos cuando enferman. »Las imágenes de niños rescatados de debajo de los escombros, heridos y en peligro, mientras tiemblan en los hospitales mientras esperan tratamiento, retratan el inmenso horror que estos niños están soportando", ha agregado.
La agencia de la ONU, que ha señalado también que 30 menores israelíes han muerto y decenas continúan secuestrados en Gaza, ha manifestado que este periodo «es la escalada de hostilidades más mortífera en la Franja de Gaza e Israel que Naciones Unidas ha presenciado desde 2006». Además, ha alertado de que casi todos los niños palestinos que se encuentran en Gaza han estado «expuestos a acontecimientos y traumas profundamente angustiosos, marcados por una destrucción generalizada», ataques, desplazamientos forzosos y escasez de artículos de primera necesidad. «La matanza y mutilación de niños, el secuestro de niños, los ataques a hospitales y escuelas y la denegación de acceso humanitario constituyen graves violaciones de los derechos de los niños», ha afirmado Khodr.
Asimismo, ha hecho un llamamiento «urgente» para acordar un alto el fuego que permita el acceso humanitario y la liberación de rehenes. «Incluso las guerras tienen reglas. Se debe proteger a los civiles, en particular a los niños, y se deben hacer todos los esfuerzos posibles para protegerlos en todas las circunstancias», ha manifestado.
Por otro lado, la relatora especial de Derechos Humanos de la ONU en los territorios palestinos, Francesca Albanese, ha asegurado que los continuos crímenes de Israel contra los palestinos han privado a sus niños de gozar de sus derechos más básicos en un esfuerzo por «impedir el desarrollo de la sociedad palestina». «La opresión y el trauma sufridos por los niños palestinos, la mitad de la población palestina bajo dominio israelí, es una mancha sin precedentes para la comunidad internacional», ha asegurado Albanese en un comunicado. Un informe de la relatora, que no cubre los eventos ocurridos a partir del 7 de octubre, muestra que entre 2008 y 2023 han muerto 1.434 niños palestinos y otros 32.175 han resultado heridos a manos de los israelíes.
El mismo informe expone que las fuerzas israelíes detienen cada a año a una media de entre 500 y 700 niños palestinos, y que suman ya un total de 13.000; la mayoría de ellos son interrogados, juzgados en tribunales militares y encarcelados. Según el documento, los niños viven a diario experiencias de violencia y confiscación de tierras familiares, expropiación de recursos, separación de comunidades, destrucción de hogares y medios de subsistencia, y ataques a su educación. «El infierno de hoy no puede ocultar la violencia de las últimas décadas. Para abordar la crisis, es imperativo comprender lo que condujo a ella. Esto no significa justificar o restar importancia a los atroces crímenes cometidos contra civiles israelíes el 7 de octubre, sino que nos obliga a afrontar ese horror en el contexto de lo que lo precedió», ha agregado Albanese.
También ha manifestado que el hecho de que Israel presente a los niños palestinos como 'escudos humanos' para justificar sus bombardeos «es profundamente deshumanizador». Por último, la relatora ha instado a la comunidad internacional a acabar con la ocupación y colinización israelí y perseguir todos sus crímenes internacionales cometidos en territorios palestinos.