El Servicio Federal de Seguridad de Rusia ha anunciado la detención de cuatro individuos sospechosos de perpetrar el atentado de este pasado viernes en la sala de conciertos moscovita Crocus City Hall, que ha dejado por ahora más de 60 muertos y 145 heridos. El director del FSB, Alexander Bortnikov, ha informado ya de estas detenciones al presidente de Rusia, Vladimir Putin, de acuerdo con un comunicado recogido por la cadena rusa RBC.
Asimismo, Bortnikov ha informado también de otros nueve detenidos presuntamente vinculados a varios niveles con el ataque contra la sala de conciertos. Poco antes, el responsable del Comité de Política de Información de la Duma de Rusia, Alexander Khinstein, avanzó la detención de dos sospechosos del atentado después de que la Policía interceptara su vehículo a la altura de la localidad de Jatsun, región de Briansk, a unos 340 kilómetros al suroeste de Moscú. El vehículo interceptado es un Renault de color blanco, coincidente con la descripción inicial proporcionada por las autoridades sobre el coche con el que los responsables del ataque contra la sala se dieron a la fuga.
En el interior del vehículo los agentes encontraron una pistola, un cargador para un fusil de asalto y pasaportes de Tayikistán, según recoge la agencia rusa TASS. Inmediatamente después del anuncio el Ministerio de Exteriores tayiko ha indicado que todavía «no ha recibido confirmación de las autoridades rusas» sobre la nacionalidad de los agresores y ha pedido a la opinión pública que espere a la verificación oficial de su identidad, según un comunicado publicado en Telegram. «Hay que tener en cuenta que la difusión de información no verificada y poco fiable puede perjudicar a los ciudadanos de Tayikistán que se encuentran actualmente fuera del país», remacha el Gobierno tayiko.