A la espera de resultados oficiales, la sacudida que la ultraderecha ha propinado a Europa ya ha tenido consecuencias de alto voltaje: Emmanuel Macron ha convocado elecciones legislativas anticipadas en Francia y primer ministro belga, Alexander De Croo ha dimitido. Menos de una hora después de que los sondeos a pie de urna anticiparan una holgada victoria de la ultraderecha en los comicios europeos, el presidente francés ha disuelto la Asamblea Nacional y ha anticipado los comicios, que se celebrarán entre el 30 de junio y el 6 de julio. «He escuchado vuestro mensaje, vuestras preocupaciones y no las dejaré sin respuesta», ha proclamado Macron, en un discurso a la nación.
En Alemania la ultraderechista AfD sería segunda fuerza, según los sondeos a pie de urna. En concreto, lograría en torno a un 16,4 % de los votos, lo que supone un importante ascenso con respecto al 11 % de hace cinco años. La coalición Unión Demócrata Cristiana (CDU)/Unión Social Cristiana (CSU) habría ganados las elecciones al Parlamento Europeo, con el 29,5 % de los apoyos. Por su parte, los sondeos pronostican un hundimiento del partido ecologista Los Verdes, socio de gobierno del Partido Socialdemócrata (SPD), que también ha sufrido una histórica derrota, y del Partido Liberal Demócrata. De hecho, algunas voces ya empiezan a pedir la convocatoria anticipada de elecciones.
En Austria la ultraderecha también conseguiría un resultado histórico, ya que Die Freiheitliche Partei Österreichs (FPÖ) se haría con el 27 % de los votos. Por tanto, quedaría por delante de los populares (23,50 %) y de los socialistas (23 %). En Países Bajos, donde la ultraderecha de Geert Wilders ganó las elecciones legislativas el año pasado, su formación podría ser la segunda fuerza en apoyo en las urnas, con un 17,7 % y superada sólo por la coalición de socialdemócratas y ecologistas, que podrían obtener un 21,6 % de los votos.
Todo apunta a que en Italia también se impondrá la ultraderecha, ya que el partido de la primera ministra Giorgia Meloni tenía un 27 % de intención de voto en los sondeos previos a la votación. Allí los colegios electorales no cierran hasta las 23:00 horas. Las fuerzas de extrema derecha, hasta ahora divididas en dos grupos políticos, podrían obtener 71 diputados en el caso de los Conservadores y Reformistas Europeos (ERC), donde se sientan partidos como Vox, y otros 62 eurodiputados en Identidad y Democracia (ID), bancada de la formación de Marine Le Pen. No obstante, esos números podrían aumentar con contribuciones de los eurodiputados hasta ahora alineados como «no inscritos» y los nuevos europarlamentarios que aún no han elegido familia política.
El Partido Popular Europeo ganaría las elecciones
Pese a que la noticia de la noche es el avance de la extrema derecha, si se cumplen lo que pronostican las encuestas, el Partido Popular Europeo (PPE) ganaría las elecciones y se mantendría como la primera fuerza con 181 escaños, por lo que ganaría 5 respecto a los últimos comicios. La Alianza de los Socialistas y Demócratas europeos (S&D) sería el segundo grupo con más presencia en el hemiciclo, con 135 eurodiputados y 4 menos que en la Eurocámara saliente. Por su parte, los liberales de Renovar Europa lograrían 82 escaños; se trata de 20 menos. La X legislatura europea contará con un hemiciclo con 720 escaños, 15 más que en la IX.
Cabe destacar que en cinco de los seis partidos fundadores de la UE, se ha producido un avance muy importante de la ultraderecha y por por primera vez el PPE podría tener una alternativa de gobierno a su derecha. Desde los años 70, los socialdemócratas y democristianos han controlado el europarlamento con la fórmula de la gran coalición. Habrá que ver qué sucede en esta ocasión, una vez que se conozcan los resultados definitivos, pero todo apunta a que la continuidad del proyecto europeo será mucho más complicada puesto que hay partidos euroescépticos e, incluso, eurófobos que obtendrán muy buenos resultados electorales si se cumplen las proyecciones.
Por tanto, la influencia de estas fuerzas en políticas tan importantes como la migratoria o medioambientales será muy importante; también hay pendiente una posible ampliación de la UE. No se puede pasar por alto el complicado momento internacional, con conflictos tan importantes como los de Israel-Gaza y Rusia-Ucrania.