Rusia atacó con drones por la noche las instalaciones del operador del sistema de transmisión de electricidad en las regiones de Poltava (centro), Sumi (noreste) y Cherníguiv (norte), lo que dejó sin energía a miles de consumidores. Asimismo, el número de víctimas mortales de un ataque ruso el viernes contra una zona residencial de la ciudad de Mikoláyiv, en el sur de Ucrania, ha aumentado a cuatro, según informó este sábado el alcalde, Oleksandr Sienkovich.
Un hombre murió en el hospital, escribió en su canal de Telegram. El ataque, en el que falleció un menor, ha causado además 14 heridos, entre ellos cuatro niños. Según informó este sábado la empresa Ukrenergo en su canal de Telegram, la mayoría de los consumidores vieron restablecido el suministro eléctrico, pero aún continúan los trabajos de restablecimiento de emergencia para otros miles de afectados.
En la región de Poltava casi 4.000 personas están sin electricidad y 700 sin agua, según la Administración Regional Militar. Allí la infraestructura civil fue atacada en el distrito de Migorod. En Cherníguiv, los rusos también alcanzaron infraestructuras energéticas, dijo el gobernador, Viacheslav Chaus, en Telegram, sin revelar el impacto en los consumidores.
Además, en la región oriental de Járkov, Rusia bombardeó la infraestructura del ferrocarril, según la empresa ferroviaria Ukrzaliznytsia (UZ), de la que cuatro empleados resultaron heridos. En total, Rusia lanzó tres misiles balísticos por la noche, un misil de crucero y 16 drones iraníes Shahed, además de uno no especificado.
Además de Járkov, Poltava, Sumi y Cherníguiv, fue atacado Kiev, según la Fuerza Aérea ucraniana. Los sistemas de defensa antiaérea derribaron 12 vehículos aéreos no tripulados y el dron de tipo no especificado. Por su parte, al menos siete personas han resultado heridas este sábado en los ataques de la artillería ucraniana contra la región fronteriza rusa de Bélgorod, donde la víspera otros seis civiles sufrieron heridas de diversa consideración.