Las Fuerzas de Tierra del Ejército ucraniano han reconocido la muerte de militares en el ataque ruso de este martes con dos misiles balísticos contra el Instituto Militar de Comunicaciones de la ciudad de Ucrania central de Poltava, en el que, según el último balance ofrecido por los servicios de emergencia, han muerto al menos 53 personas.
«Hay decenas de bajas y centenares de heridos. Hemos perdido a ucranianos valientes, a nuestros camaradas, a soldados», dice el comunicado de las Fuerzas Terrestres. Según los servicios de emergencias, el número de heridos en el ataque, uno de los más letales de toda la guerra, asciende a 298.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, explicó después del ataque que dos misiles rusos alcanzaron una institución educativa y un hospital en Poltava, destruyendo parte del Instituto de Comunicaciones. El presidente no hizo alusión al carácter militar de la infraestructura. El Ministerio de Defensa ha iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias en las que se produjo el ataque masivo.
Algunos de los analistas militares ucranianos más influyentes han dado por sentado que decenas de militares murieron en el ataque, y han criticado a los mandos militares por concentrar en un mismo lugar expuesto a los bombardeos enemigos a una gran cantidad de soldados.