El dólar se encaminaba a primera hora de este viernes hacia su mejor semana en casi tres años frente a sus principales competidores, manteniendo después de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, impusiera a decenas de socios comerciales.
El dólar también ganaba en catalizadores no arancelarios, mientras que el yen tocaba un mínimo de cuatro meses, lo que extendía una fuerte caída desde el jueves después de que el señalara que no tenía prisa por reanudar las subidas de tipos de interés.
Esto llevó al ministro de Finanzas japonés, Katsunobu Kato, a declarar el viernes que las autoridades están «alarmadas» por los movimientos de la divisa. El yen se cambiaba al cierre de este artículo a 150,725 por dólardes después de haber caído a 150,915 por dólar, su nivel más bajo desde el 28 de marzo. El índice del dólar estadounidense —que mide la divisa frente a una cesta de seis divisas principales, como el euro, el yen, el franco suizo y el dólar canadiense— va camino de subir un 2,5% esta semana, su mejor resultado semanal desde el repunte del 3,1% registrado en septiembre de 2022.
Este viernes subía un 0,1%, hasta 100,14, el nivel más alto desde el 29 de mayo.
A algunos países les fue mucho peor que a otros en las tasas arancelarias, lo que afectó a sus divisas. Canadá recibió un gravamen del 35% en lugar del 25% con el que había amenazado anteriormente, lo que rebajaba al «loonie» un 0,12%, a 1,3872 dólares canadienses, su mínimo desde el 22 de mayo frente a su homólogo estadounidense. El franco suizo descendía hasta un 0,26%, a 0,8120 por dólar, después de que Trump estableciera un arancel del 39% sobre las importaciones suizas, frente al 31% que había propuesto anteriormente.