El mercado del oro atraviesa una fase de consolidación estratégica, con el precio manteniéndose alrededor de los 3.340 dólares por onza troy en un contexto de extrema cautela por parte de los inversores globales. Esta estabilidad relativa se produce en un escenario donde la apreciación del dólar estadounidense y el incremento en los rendimientos de los bonos del Tesoro actúan como factores limitantes para el avance del metal precioso, situación que se espera persista hasta conocerse la postura oficial de la Reserva Federal.
Los operadores financieros en España y el resto del mundo mantienen su atención fija en el próximo discurso de Jerome Powell programado para este viernes en el simposio económico de Jackson Hole. Este evento anual, considerado uno de los acontecimientos más relevantes del calendario financiero internacional, podría ofrecer indicios determinantes sobre la dirección que tomará la política monetaria estadounidense en los próximos meses, especialmente respecto al equilibrio entre el control inflacionario y el apoyo al mercado laboral.
Durante las últimas semanas, los indicadores económicos de Estados Unidos han presentado señales contradictorias que complican la toma de decisiones. Por un lado, el índice PMI manufacturero ha regresado a territorio de expansión tras varios meses de contracción, alcanzando los 50,3 puntos frente a los 49,8 del mes anterior, lo que evidencia una recuperación moderada en el sector industrial norteamericano. Sin embargo, las solicitudes semanales de subsidio por desempleo aumentaron hasta las 234.000, su nivel más elevado desde marzo de 2025, generando preocupación sobre la solidez del mercado laboral.
Contexto político e influencia en los mercados
La situación política en Estados Unidos ha añadido un elemento adicional de incertidumbre tras la sorpresiva solicitud de Donald Trump exigiendo la dimisión inmediata de la gobernadora de la Reserva Federal, Lisa Cook, bajo acusaciones de presunto fraude académico. Este movimiento, considerado por muchos analistas como una injerencia sin precedentes en la independencia del banco central, ha intensificado las tensiones institucionales y elevado la percepción de riesgo en los mercados financieros.
Según explican fuentes cercanas al Banco de España consultadas, esta clase de confrontaciones políticas suelen tener un impacto directo en la cotización del oro, que tradicionalmente funciona como valor refugio durante periodos de inestabilidad. «En momentos de incertidumbre institucional, los inversores españoles y europeos tienden a incrementar su exposición a metales preciosos como mecanismo de protección patrimonial, especialmente cuando existen dudas sobre la independencia de los organismos reguladores», señalan desde la entidad.
Factores técnicos y perspectivas de cotización
Desde una perspectiva técnica, el oro se encuentra en una encrucijada. Los analistas del mercado en España identifican la zona de los 3.400 dólares como una resistencia significativa que, de superarse, podría abrir la puerta a un nuevo rally alcista hacia los 3.500 dólares por onza. En contraposición, el soporte crítico se sitúa en torno a los 3.300 dólares, nivel que ha actuado como base sólida durante los últimos movimientos correctivos del precio.
Las minutas de la última reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) revelaron importantes divergencias entre sus miembros. Mientras un grupo minoritario defendió la necesidad de implementar recortes de tipos para revitalizar el empleo, la mayoría expresó su preocupación por el potencial impacto inflacionario de los nuevos aranceles comerciales impulsados por la administración Trump desde principios de 2025. Esta división interna ha reducido significativamente las expectativas de una reducción de tipos en la próxima reunión de septiembre, situación que ha fortalecido al dólar y presionado a la baja el precio del oro.
En el contexto internacional, el reciente acuerdo comercial parcial alcanzado entre Estados Unidos y la Unión Europea ha proporcionado un respiro momentáneo a las relaciones económicas transatlánticas. No obstante, las persistentes tensiones con Rusia respecto al conflicto ucraniano continúan aportando un componente geopolítico favorable para la demanda de oro como activo de protección frente a la volatilidad global.
Impacto en el mercado español e inversores particulares
Para los inversores españoles, la actual coyuntura presenta tanto desafíos como oportunidades. Según datos del Consejo Mundial del Oro, la demanda de inversión física en España ha aumentado un 14,2 % durante el primer semestre de 2025 en comparación con el mismo periodo del año anterior, reflejando un creciente interés por activos tangibles frente a la incertidumbre económica y las tensiones geopolíticas.
Los expertos financieros consultados recomiendan mantener una exposición diversificada al metal precioso como parte de una estrategia de inversión equilibrada. «El oro ha demostrado históricamente su capacidad para preservar valor durante ciclos económicos adversos, pero su rendimiento debe analizarse en horizontes temporales amplios», explica Juan Martínez, analista de mercados de materias primas de un importante banco español, quien estima que el precio podría oscilar entre los 3.300 y 3.600 dólares durante el resto de 2025, dependiendo de la evolución de los tipos de interés estadounidenses.
De cara a los próximos meses, la dirección del mercado estará determinada en gran medida por el mensaje que transmita Jerome Powell en Jackson Hole. Un discurso que priorice el apoyo a la economía podría impulsar al oro hacia nuevos máximos históricos, mientras que un énfasis en el control inflacionario limitaría su potencial alcista. En cualquier caso, el metal dorado seguirá funcionando como un termómetro fiable de la confianza de los inversores en el sistema financiero global y como indicador adelantado de las expectativas sobre la política monetaria internacional.
Para los inversores españoles interesados en profundizar sobre este tema, resulta relevante consultar información actualizada sobre fiscalidad de metales preciosos, que ha experimentado modificaciones recientes tras la entrada en vigor de la nueva normativa tributaria en enero de 2025. Igualmente, conviene revisar las proyecciones sobre la relación euro-dólar y su impacto en los precios del oro denominados en la moneda europea, factor especialmente relevante para los compradores españoles de lingotes y monedas de inversión.
La evolución del mercado aurífero en las próximas semanas estará estrechamente vinculada a los datos macroeconómicos que se publicarán tanto en Estados Unidos como en la eurozona. El próximo informe de empleo estadounidense previsto para el 5 de septiembre de 2025 y la decisión sobre tipos de interés del Banco Central Europeo (BCE), programada para el 11 de septiembre, serán eventos determinantes que podrían provocar movimientos significativos en la cotización del metal precioso y ofrecer oportunidades de entrada o salida para los inversores atentos a las señales del mercado.
El oro subirá porque lo compras y vendes con divisas que cada vez valen menos, es tan simple como eso.