La Policía de Israel anunció este jueves que ha fichado a 250 personas que viajaban a bordo de la Global Sumud Flotilla antes de presentarlas ante el juez de cara a su eventual deportación. El comunicado policial precisó que buscan «garantizar el orden público y frustrar cualquier intento de socavar la legitimidad de las acciones del Estado de Israel». «Los oficiales y soldados de la Policía trabajan con determinación, profesionalismo y plena cooperación con las Fuerzas de Defensa de Israel, el Servicio de Inmigración y Población, la Autoridad de Población e Inmigración, las fuerzas de rescate y otros socios de los ministerios gubernamentales», dijo la nota.
El ministro de Exteriores de Italia, Antonio Tajani, que ha estado en contacto en las últimas horas con su homólogo israelí, Gideon Saar, ha asegurado que el Gobierno de Benjamín Netanyahu pretende emitir una única orden para deportar en dos vuelos chárter a todos los miembros de la Global Sumud Flotilla y que estos aviones aterrizarían, en principio, en Madrid y Londres. «Han solicitado Madrid y Londres, pero ya veremos», ha dicho Tajani, en una comparecencia este jueves ante la Cámara de Diputados.
La Global Sumud Flotilla se encuentra casi completamente desarticulada. De sus 500 integrantes, 443, más del 90 %, están detenidos y solo se mantiene en el Mediterráneo el barco Summertime, de apoyo legal. La flotilla pretendía romper el bloqueo a Gaza y llevar ayuda humanitaria, pero desde la tarde del miércoles la Armada israelí se empleó a fondo en impedir que sus barcos llegasen a adentrarse en aguas territoriales. Por ello, en poco más de 12 horas, abordó todas las naves y detuvo a los tripulantes, a excepción de la Summertime, dando por finalizada la misión. La Policía de Israel añadió en su comunicado que se desplegaron en el puerto de Ashdod más de 600 agentes y oficiales penitenciarios y de inmigración para hacerse cargo de los detenidos.
La operación continúa y continuará durante la noche hasta que pase por ese proceso de registro «el último barco de la flotilla», dijo la nota. El Gobierno de Israel ya había advertido de que no permitiría que las embarcaciones llegasen a su destino y sugirió que descargaran la ayuda humanitaria en puertos bajo su control para ser «organizada y distribuida» por las autoridades israelíes. La flotilla rechazó esa propuesta desde el primer momento y pese a las amenazas e incluso ataques con drones o explosiones disuasorias sus activistas continuaron su travesía hasta que fueron interceptados.
Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, felicitó este jueves a «soldados y comandantes» de la marina israelí que interceptaron las embarcaciones de la Global Sumud Flotilla, que en palabras del dirigente «repelieron una campaña de deslegitimación» contra Israel. «Felicito a los combatientes y comandantes de la Armada, quienes llevaron a cabo su operación durante Yom Kipur de la manera más profesional y eficiente», recoge el comunicado, que llegó tras concluir la festividad del Yom Kipur, la más sagrada para el judaísmo. «Su importante acción impidió que decenas de buques entraran en la zona de guerra y repelió una campaña de deslegitimación.
El secretario general de la ONU, António Guterres, dijo a través de uno de sus portavoces que la prioridad del organismo es evitar «cualquier daño» a las personas a bordo de la Flotilla Global Sumud. «Nuestra prioridad es evitar cualquier daño en las personas que van a bordo de los barcos, y esperamos que sean tratadas de forma justa y que se respeten sus derechos y su dignidad», expresó el portavoz adjunto de Guterres, Farhan Haq, a preguntas de la prensa en su rueda de prensa diaria.
Además, resaltó el carácter humanitario de la flotilla, que navega con el fin de proporcionar ayuda y romper el bloqueo en la franja: «Nuestra opinión es que se debe dejar en paz a las personas que simplemente transportan ayuda humanitaria», agregó. El portavoz aseguró que la ONU aboga por que se apoyen «todos los esfuerzos» para proporcionar ayuda humanitaria a los gazatíes, y dijo querer asegurarse de que todos los civiles son tratados de manera justa. «Estamos intentando encontrar formas de evitar cualquier escalada de la situación y que todo se resuelva sin ningún daño para quienes participan (en la flotilla)», reiteró. Haq aseguró que la ONU apuesta por respetar las leyes que se aplican en aguas internacionales y se mostró evasivo al calificar los arrestos de cientos de los tripulantes como ilegales, ya que eso «corresponde a los tribunales».
Antonio BibiloniQue les hagan las pruebas de mayoría de edad...