El Infiniti QX70 deriva directamente del FX, vehículo que salió a la venta por primera vez en 2003, que cambió de nombre por el actual en la renovación que se le llevó a cabo durante 2013. Estéticamente, a pesar de ya llevar algunos años en el mercado, es sin duda uno de los vehículos más atractivos de su segmento gracias a una prominente parte delantera, que destaca por su aspecto agresivo, lo que le da un atractivo único. Los faros delanteros no son de grandes dimensiones, pero sí que muestran una estética original, con cierto diseño desigual. También podemos destacar de la parte delantera la gran parrilla cromada y la sensación de conjunto que da toda la parte anterior, sin fisuras de ningún tipo.
La parte posterior es igualmente atractiva, con unos faros LED, también de pequeñas dimensiones, que recuerdan un poco a los que lleva el Cayenne, con ciertas diferencias. De la parte posterior también cabe destacar la doble salida de escape (también de grandes dimensiones), que le acaba de dar ese toque deportivo tan chocante en un vehículo de estas dimensiones.
En cuanto al motor, nosotros hemos probado el único propulsor diésel disponible para este modelo, el seis cilindros diésel 3.0 litros con cambio automático de siete velocidades, manejable también de forma manual con las levas en el volante o mediante el cambio de velocidades de forma secuencial.
La potencia máxima de éste es de 238 CV, una cifra que hace que sus prestaciones en carretera sean suficientes para circular de forma bastante dinámica sin problemas. Así, para ponerse de 0 a 100 Km tarda poco más de 8 segundos y la velocidad máxima es de 212 Km/h.
El botón que regula la amortiguación para que se muestre más dura y el vehículo adquiera un carácter más deportivo ayuda a este dinamismo en las curvas y también se nota ligeramente en el motor. La verdad es que se echa un poco de menos la multi-regulación del motor que sí tienen algunos modelos de la competencia, como los BMW o los Mercedes. En la próxima versión seguro que ya estará disponible.
Haciendo los cambios de velocidad de forma manual, el rendimiento del motor no mejora en exceso, ya que la respuesta del motor al acelerador es muy buena en prácticamente todas las situaciones, si bien en algún caso tarda un poco en reaccionar.
Una de las cosas más sorprendentes del motor es sin duda el consumo, ya que un vehículo de este peso y dimensiones parece que tendría que tener un consumo bastante alto, pero no es así en absoluto. La marca da una cifra de 8'3 litros a los 100 Km y nosotros, en un recorrido mixto, con una conducción alegre, hemos conseguido 9'3 litros, una cifra que no está nada mal.
El comportamiento del QX70 en carretera es realmente bueno en cualquier circunstancia, lo cual viene refrendado gracias al sistema CDC, que ajusta automáticamente la suspensión para garantizar la estabilidad, el control y la comodidad del vehículo. El hecho de que la tracción a las cuatro ruedas sea también auto-regulable ayuda también a un mejor comportamiento.
INTERIOR
El interior destaca por su gran confort y su gran calidad en los acabados con la tapicería de cuero y huyendo de los molestos plásticos. Los asientos delanteros cuentan con reglaje eléctrico y es muy fácil encontrar la posición ideal de conducción. La parte posterior es igualmente cómodo gracias a la mayor altura para las piernas, aunque el espacio posterior es menor del previsto a priori. El equipamiento de serie es de lo más completo gracias a todos los elementos de confort disponibles, además de algunos opcionales interesantes. Entre el equipamiento de serie podemos encontrar la cámara posterior, el avisador de cambio de carril, navegador, sistema de advertencia de colisión frontal, faros bi-xenón, etc.