Adriano Zanini es el propietario de este maravilloso Porsche 356 Speedster de 1963 que compró hace siete años en Suecia. Esta pequeña joya, además de varias motos Ducati, forman parte de su colección de vehículos clásicos que ha ido reduciendo con los años. Un escarabajo Cabrio naranja y un Alpha Romeo Giugletta Spider 101 del 62 pasaron también por sus manos.
El amante de los vehículos siempre había querido tener este Porsche, en negro, pero lo encontraba muy caro. Un día, durante uno de sus viajes, conoció a una persona que tenía varios autos en un descampado y uno de ellos era el deportivo rojo. A pesar de no estar en muy buenas condiciones y no tener motor lo compró.
El coche fue desde Suecia hasta Barcelona en tren y finalmente llegó a Mallorca en barco. «Cuando fui a recogerlo al puerto lo encontré rodeado de gente que lo contemplaban y se quedaban mirándolo», nos cuenta el propietario del vehículo.
Adrián, que se dedica a la posventa de motos y tiene conocimiento de mecánica, construyó el motor de su nueva adquisición. Nos explica que el coche no ha tenido ningún fallo y solo le tuvo que cambiar la tapicería de los asientos y las ruedas.
El 356 fue el primer automóvil de serie fabricado por Porsche en 1948 y estuvo en producción hasta 1965. Tiene dos plazas, se compone por un motor trasero montado sobre un chasis derivado de Volkswagen, tiene cuatro marchas, 90 CV de potencia y puede alcanzar una velocidad máxima de 140 km/h.
El dueño del deportivo lo describe como un coche elegante y con estilo. Recorre al año unos 1.000 kilómetros ya que lo utiliza muy esporádicamente o para ir a eventos.