Está claro que ya no hay vuelta atrás en lo que se refiere a los vehículos híbridos, híbridos enchufables y/o eléctricos. La firma alemana se ha puesto las pilas en los vehículos eficientes y eléctricos y de qué manera. Este Mercedes EQV es el primer monovolumen premium 100 % eléctrico, que nos ha causado muy buena impresión en todos los aspectos. La marca germana tiene dos modelos que ya no están disponibles con motor de combustión: el eVito y el eSprinter. A simple vista, el EQV tiene algunos detalles de diseño diferentes respecto a las versiones convencionales del Clase V, aunque no son diferencias muy notables. Cambia la parrilla, que ahora cuenta con elementos cromados y enmarcada en una moldura negro brillante y los faros de led también muestran el fondo en color negro.
Además se proponen diferentes llantas de aleación, algunas con un diseño específico, aparte de algunos logos que identifican la versión. Hay otro elemento propio: la toma de carga de las baterías está situada en un extremo del paragolpes delantero.
SILENCIOSO
A la hora de conducirlo llama mucho la atención el hecho del silencio total del propulsor eléctrico. Circulando por ciudad no se escucha más que la música que llevemos puesta o un leve silbido del motor en caso de viajar sin música ni acompañantes.
En carretera el nivel de confort sigue siendo excepcional, e incluso el nivel sonoro por culpa del aire sigue estando acotado dentro de unos límites más que razonables. Además, como la velocidad máxima está limitada a 140 km/h (en España 160 Km/h) para no disparar el consumo, el ruido aerodinámico rara vez supone un problema.
Aunque es un vehículo pesado -la versión Larga supera los 2.600 kg-, tenemos a disposición 204 CV de potencia y 362 Nm de par provenientes de un motor eléctrico asíncrono, suficiente para tener buena respuesta en cualquier circunstancia.
La Mercedes EQV 300 tiene cuatro modos de conducción: C, E, E+ y S. En los modos C y S tenemos disponible la máxima potencia, aunque en el modo S (más deportivo) la respuesta del acelerador es más inmediata. El modo E (por Economy) limita la potencia a 136 CV y 293 Nm, además de reducir ligeramente las prestaciones del climatizador. Por su parte, el modo E+ está pensado para conseguir la máxima autonomía, y la potencia máxima del motor se limita a 109 CV.
El Mercedes EQV es capaz de ofrecer una autonomía de 357 km según el ciclo WLTP, una cifra que está muy bien, y en ciudad la homologación refleja 482 km. El consumo de corriente medio se sitúa en torno a 30 kWh/100 km, un valor bastante razonable para un coche de este tamaño.
No se pierde nada de espacio respecto al Clase V, así que el interior propone las mismas configuraciones que un Clase V con motor de combustión, con hasta 8 plazas que se pueden deslizar, abatir o cambiar de orientación. Hay dos opciones de carrocería para el EQV, una larga (5,14 m de longitud) y otra extralarga (5,37 m). La capacidad del maletero también permanece inalterada ofreciendo 1.030 litros en la versión larga y 1.410 litros en la extralarga.
En la nueva instrumentación sustituye el cuentarrevoluciones por un potenciómetro que nos va a ayudar a realizar una conducción más eficiente, además de algunos indicadores sobre el nivel de carga de la batería, la autonomía restante o la capacidad de retención seleccionada.
Para controlar lo que tenemos en los alrededores, además de los espejos tradicionales, contamos con cámaras 360º de muy buena resolución que nos permiten controlar todo el perímetro del vehículo de manera muy cómoda.