El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, aseguró ayer que las cuentas de la Seguridad Social tienen una "salud de hierro", ya que se han pagado todos los gastos en 2009 y "han sobrado 8.000 millones".
No obstante, apostó por acabar con la cultura de la jubilación anticipada para garantizar que el buen estado de las cuentas continúe en los próximos años. Además, pidió a los partidos políticos que realicen "menos críticas y más propuestas" para construir el futuro y arremetió contra el PP que, a su juicio, no le preocupa cómo va a vivir la gente en el año 2025.
En un acto celebrado en la sede del PSOE y en compañía de la secretaria de organización del partido, Leire Pajín, del secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, y de la secretaria de Bienestar Social, Marisol Pérez, el ministro Corbacho explicó que los socialistas "a lo largo de la historia han tenido que hacer propuestas que en el corto plazo pueden parecer que contradicen sus señas de identidad pero que en el largo plazo se han demostrado que no".
Se refería así a la propuesta de reforma de pensiones presentada por el Gobierno el pasado viernes, mediante la cual quieren retrasar la edad de jubilación de los 65 a los 67 años, argumentando que así se garantizaría el pago de pensiones en las próximas décadas. En este sentido, Corbacho explicó que el Gobierno socialista ha sido "contundente" a la hora de garantizar las pensiones y que se trata de un "compromiso" del Ejecutivo de Rodríguez Zapatero.
"Es necesario asegurar a aquellas personas que se jubilen en 2025 que pueden hacerlo con la misma tranquilidad que aquellos que lo harán en 2010", aseveró. Además, apostó por acabar con "la cultura de la jubilación anticipada", a pesar de que en momentos de crisis pueda representar una "solución para las empresas", y que habrá que revisar el proceso de jubilación en función del sector ya que, en su opinión, "no es lo mismo trabajar en el andamio que ser profesor".
Del mismo modo, explicó que cuando se habla de rebajas en las cuotas de la Seguridad Social "hay que ver la historia", porque en tan sólo 20 años se ha bajado un punto y los empresarios tuvieron que asumir la baja laboral "desde el cuarto y hasta el decimoquinto día"."Cuando el PP pide que se baje dos puntos es porque lo que menos le preocupa es cómo va a vivir la gente en 2025", apostilló.
"Este Gobierno no va a recortar derechos y el mayor que se recortaría es que en 2025 aquel que se jubile no cuente más que con la mitad de su pensión o con una asistencial porque no hay dinero, después de estar muchos años cotizando", agregó el titular de Trabajo, al tiempo que destacó que se trata de un debate que no "hay que concluir en dos meses".
En este sentido, el secretario de Estado de Seguridad Social, Octavio Granado, destacó que dentro de esta propuesta formulada por el Gobierno "no existen plazos", a pesar de lo que se haya hablado, y que "ha pillado al país por sorpresa"."Si hoy tenemos un buen sistema de Seguridad Social es porque Felipe González, para evitar problemas financieros, sacó de las cotizaciones sociales a la sanidad y a los servicios sociales", apuntó.
Asimismo, resaltó que la sociedad actual es la que debe "tirar del carro" para asegurar las pensiones de la población de dentro de 30 años, donde habrá tres millones de pensionistas más y la esperanza de vida será mayor y las personas vivan más de 65 años."Tenemos que hacerlo de acuerdo con el resto de países europeos, poquito a poco.Queremos que el sistema sea justo. Hemos intentado presentar una propuesta donde el Gobierno asume su responsabilidad en un tema que no es bonito sino complicado, igual que hizo Felipe González hace 25 años, o como ya se hizo hace 15 con el Pacto de Toledo", concluyó.