Las fuerzas estadounidenses finalmente encontraron al líder de Al Qaeda, Osama bin Laden, no en las montañas de la frontera con Afganistán, sino en un recinto de millón de dólares en un enclave turístico a poco más de una hora en coche de Islamabad, junto con su mujer, según informaron las autoridades norteamericanas.
Un pequeño equipo estadounidense llevó a cabo un asalto en helicóptero en la madrugada de ayer (hora paquistaní, la tarde del domingo en Estados Unidos), según los responsables. Tras 40 minutos de enfrentamiento, Bin Laden y un hijo mayor de edad, una mujer no identificada y dos hombres --identificados como el correo y su hermano-- han fallecido, según las autoridades.
Las fuerzas norteamericanas fueron llevadas al edificio de tres plantas, que parecía una fortaleza, tras más de cuatro años persiguiendo a uno de los principales correos de confianza de Bin Laden, quien fue identificado por hombres capturados tras los atentados del 11-S. "Los detenidos también identificaron a este hombre como uno de los pocos correos de Al Qaeda en los que confíaba Bin Laden. Indicaron que podría estar viviendo con Bin Laden o protegido por él", señaló un alto responsable de la Administración a la prensa.
Finalmente Bin Laden fue hallado después de que las autoridades descubrieran en agosto de 2010 que el correo vivía con su hermano y sus familias en un edificio inusual y con medidas extremas de seguridad, explicaron las autoridades estadounidenses. "Cuando vimos el recinto donde vivían los hermanos, quedamos conmocionados por lo que vimos: un recinto extraordinariamente único", destacó un alto cargo de la Administración Obama.
"La conclusión de nuestro análisis fue que teníamos gran confianza en que el recinto albergaba a un objetivo terrorista de alto valor. Los expertos que trabajan en esta cuestión durante años consideraron que había una gran probabilidad de que el terrorista que estaba escondido fuera Bin Laden", explicó otro responsable.
La vivienda se encuentra en Abbotabad, una localidad a unos 60 kilómetros al norte de Islamabad, donde residen muchos miembros retirados del Ejército paquistaní. El edificio, como ocho veces el tamaño de las casas cercanas, se encuentra en un vasto terreno que estaba relativamente apartado cuando fue construido en 2005, si bien desde entonces se han construido otras casas cerca.
MEDIDAS DE SEGURIDAD
Entre las medidas de seguridad había muros de entre 3,6 y 5,5 metros de altura coronados por alambre de espino y muros internos que dividían en distintas zonas el recinto, según los responsables. Dos puertas de seguridad restringían el acceso y los residentes quemaban su basura, en lugar de dejarla para que se la recogieran, como el resto de vecinos.
Pocas de las ventanas del edificio daban para el exterior y la terraza contaba con un muro de privacidad de 2,1 metros de alto, relataron los responsables. "También es de destacar que la propiedad está valorada en aproximadamente un millón de dólares pero no tiene teléfono ni servicio de internet", destacó un responsable, incidiendo en que además "los hermanos no tenían una fuente explicable de su riqueza".
pruebas de adn
Las pruebas de ADN confirman con absoluta seguridad que el líder de la red terrorista Al Qaeda, Osama bin Laden, murió en el asalto a la residencia donde se ocultaba en las afueras de Islamabad, aseguró ayer un alto funcionario estadounidense. Otro alto cargo del Pentágono, que también habló bajo la condición del anonimato, explicó que para identificar el cadáver se utilizó "una variedad de métodos", que no especificó. Los agentes recuperaron el cadáver del líder de Al Qaeda, que se trasladó a un buque de guerra estadounidense. Tras su identificación, y la toma de fotografías del cadáver -que el Gobierno estadounidense trata aún de decidir si hará públicas o no- se optó por arrojar los restos del terrorista al mar.
Según el alto funcionario, la decisión se tomó para evitar que, si se le enterraba, su tumba pudiera convertirse en un lugar de peregrinación para extremistas islámicos. Además, precisó, hubiera sido complicado encontrar un tercer país dispuesto a aceptar los restos del terrorista más buscado del planeta. De acuerdo con la fuente, el cadáver se trató de acuerdo con lo que prescriben las costumbres islámicas, que establecen que los cuerpos se entierren casi de inmediato tras el fallecimiento.