El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, pidió ayer "serenidad" y "mesura" a "todo el mundo" para que no se vuelvan a producir incidentes como los vividos los últimos días en las calles de Valencia y lamentó que las protestas reprimidas por la Policía están dando "una imagen fuera que no es la de nuestro país".
Así respondió el jefe del Ejecutivo al ser preguntado en Londres, durante una rueda de prensa con el primer ministro británico, David Cameron, acerca de si considera que los incidentes en Valencia son un hecho aislado o pueden extenderse por los ajustes.
Rajoy comenzó reconociendo que la situación que vive España es "difícil" pero recalcó que todos los ciudadanos deben "hacer un esfuerzo para estar a la altura" de las circunstancias. "Es la hora de la serenidad y la responsabilidad y, desde luego, no podemos dar una imagen fuera que no es la de nuestro país", dijo.
El presidente dejó claro que "todo el mundo tiene derecho a manifestarse y a expresar sus opiniones", pero también recalcó que "todo el mundo tiene que entender" que la Policía y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado "tienen unas funciones que cumplir". "Creo que si todo el mundo actúa con mesura y con sentido común este tipo de cosas no se va a repetir", agregó.
El presidente reconoció que la situación en España, como en "otros" países de la Unión Europea, es "compleja", pero defendió que el Gobierno está adoptando medidas de manera "justa y equitativa". De hecho, señaló que se han tomado decisiones que afectan a "mucha gente", entre ellos a las entidades financieras, las Administraciones Públicas y los contribuyentes, pero insistió en que en este momento "lo mejor para España es que todos tiraran del carro".
"Todos debemos hacer un esfuerzo, y me incluyo a mí mismo, para estar a la altura y creo que es la hora de la serenidad y de la responsabilidad", remarcó.