El ministro de Economía y Competitividad, Luis De Guindos, ha asegurado que en "los próximos días y semanas" el Gobierno establecerá una regulación de las sociedades que utilizará para arrinconar los activos inmobiliarios de la banca.
En declaraciones a los periodistas tras su intervención en el Barcelona Tribuna organizado por Societat Barcelonesa d'Amics del País, la Asociación Española de Directivos (AED) y La Vanguardia, ha explicado que el objetivo es que las entidades con activos inmobiliarios "los puedan ir sacando con ventas parciales o a través de sociedades", aunque ha precisado que serán actuaciones voluntarias por parte de los bancos.
Aunque ha evitado detallar en qué consistirá la regulación de estas sociedades, ha añadido que el planteamiento inicial es que cada banco pueda crear "su propio vehículo con unas reglas determinadas" que establecerá el Gobierno.
Ha recordado que de momento el Gobierno ha exigido un ajuste en las valoraciones del crédito dudoso promotor, que alcanza los 180.000 millones, en base al suelo, a promociones en curso y a vivienda terminada.
Según De Guindos, el Gobierno ha realizado un ajuste importante en la valoración de estos activos que, actualmente, "en términos generales tienen precios de mercado". Por ello, considera que existe la posibilidad de que entren compradores y haya transacciones que son "razonables" desde un punto de vista de operaciones de mercado.
Ha recordado también que los bancos tienen hasta finales de año para hacer las valoraciones a la espera de que el Gobierno presente el marco general para que se puedan crear estos instrumentos equivalentes a un 'banco malo'.
Además, según de Guindos, las entidades financieras que hayan hecho todos los ajustes podrán actuar más rápidamente que las que no los hayan llevado a cabo, por lo que tendrán que esperar a que pase el ejercicio en curso.
BONOS
Durante su conferencia y coloquio de ayer, De Guindos también ha celebrado la buena aceptación de la subasta de bonos, en la que España ha captado 2.516 millones de euros pese a haber tenido que aumentar el interés a niveles de diciembre.
También considera una buena noticia que haya existido "bastante demanda" de inversores extranjeros.