Las siete obras maestras, entre ellas de Picasso, Monet y Matisse, robadas del Museo Kunsthal de Rotterdam en 2012, no han sido quemadas, sostuvieron ayer los abogados de tres de los presuntos autores del golpe en la primera vista del juicio.
Los letrados del supuesto cabecilla del robo, Radu Dogaru, y de sus cómplices, Eugen Darie y Alexandru Bitu, pidieron además que se les entregara a la justicia de Holanda, donde la legislación penal no es tan severa.
El Tribunal del Sector 3 de Bucarest, que comenzó ayer el proceso contra seis personas por el robo de los lienzos, decidió aplazar el juicio hasta el próximo 10 de septiembre apenas comenzada la vista, debido a la petición de libertad bajo fianza de algunos de los sospechosos.
"Nuestros clientes esperan un proceso correcto para hacer todos los trámites con el fin de entregar estos cuadros a las autoridades holandesas. Nos informaron (los acusados) de que los lienzos no se han quemado", declaró Maria Vasi, abogada de Eugen Darie.
Esa letrada subrayó que los documentos que maneja la defensa les hacen creer que los presuntos ladrones dicen la verdad.
Otro abogado, Catalin Dancu, defensor de Radu Dogaru y su madre, Olga, declaró a la prensa antes de entrar al tribunal que pretendía proponer a los fiscales la entrega de cinco de los cuadros robados a cambio de cumplir la condena en Holanda.
Olga declaró en julio que había quemado los cuadros en una estufa de su domicilio en la pequeña localidad de Carcaliu, al este de Rumanía, para proteger a su hijo. Días después se retractó de ese testimonio.