El programa de Pablo Motos se propuso demostrar con pruebas fehacientes que la creencia que apunta a que los hombres tienen más maña con el manejo del balón con los pies es un falso mito.
Así, aprovechando la visita del jugador del Betis Joaquín, El Hormiguero 3.0 emitió uno de sus populares vídeos con trampa, para poner en evidencia que el fútbol no es solo cosa de chicos, y que a fuerza de practicar hombres y mujeres pueden ofrecer espectáculo por igual.
En esta ocasión el 'gancho' fue Brenda Pérez, una jugadora de fútbol profesional que es introducida en un partido de hombres, caracterizada como tal para evitar que sus oponentes descubrieran el experimento.
Lo visto encima del campo relegó los prejuicios en este asunto y sorprendió a muchos.