El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, han reivindicado este sábado la vía que representa el cabeza de lista de Catalunya en Comú-Podem, Xavier Domènech, que se ha alejado de pactos postelectorales con Junts per Catalunya (JxCat) y Ciudadanos.
En el mitin central de Catalunya en Comú-Podem ante unas 2.000 personas según la organización, en la plaza Mayor de Nou Barris, en Barcelona, arropado por Iglesias, Colau, y el coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, Domènech ha dejado claro que tras las elecciones del 21D, si las urnas confirman su papel decisivo, no piensa utilizar la «llave» de la gobernabilidad para pactar con las candidaturas que encabezan Carles Puigdemont e Inés Arrimadas.
Domènech ha destacado que tanto JxCat como Ciudadanos le sugieren que se abstenga para facilitar la investidura de Puigdemont o Arrimadas: «Eso nunca, hemos venido a transformar, no a abstenernos. Hemos venido a echarlos, no a abstenernos», ha subrayado.
«Somos la llave para acabar con los bloques», ha insistido el candidato de los comunes a la presidencia de la Generalitat, que ha augurado una «remontada histórica» pese a las encuestas que le conceden unos resultados a la baja.
Justamente en Nou Barris, uno de los feudos de Colau en las últimas elecciones municipales pero con una bolsa de votantes que fluctúan entre los comunes y Ciudadanos en las autonómicas, la alcaldesa ha sido tan o más explícita a la hora de marcar las líneas rojas de la candidatura de Domènech de cara a posibles pactos.
«Nunca haríamos presidenta a Arrimadas», ha advertido Colau, que ha arremetido contra Ciudadanos porque «por mucho que se disfracen de nueva política» en realidad «nacieron para animar el conflicto y atentar contra la convivencia en Cataluña», mientras «ayudan al PP a gobernar y a mantenerse en el poder».
Pero Colau también ha cargado contra el «bloque de los irresponsables» que promovieron la vía unilateral a la independencia que ha provocado «dolor y tristeza» y llevaron a Cataluña hasta el «precipicio": «No estaremos nunca en este bloque», ha remachado.
Ha cerrado el mitin el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, que ha reivindicado la vía Domènech frente a «aventureros» independentistas y «monárquicos anticatalanistas».
Iglesias ha exigido «respeto» al independentismo hacia quienes han defendido los «derechos nacionales de Cataluña» por toda España y ha destacado el «fracaso del procesismo» impulsado por aquellos cuyo proyecto ha terminado con una Cataluña «intervenida» que, «40 años después» de la recuperación del autogobierno, tiene que volver a gritar «Libertad, amnistía, Estatuto de Autonomía».
Pero tampoco puede ser una alternativa, a su juicio, un gobierno con Inés Arrimadas de presidenta, Xavier García Albiol de «conseller en cap» y con el socialista Miquel Iceta «bailando al son de José María Aznar y Ciudadanos».
Para Iglesias, un gobierno con PP y Ciudadanos no puede ser la solución: «De azul o de naranja, la derecha no será nunca una alternativa política para Cataluña».
Previamente, Garzón ha recalcado que las elecciones del 21D no van de «banderas» sino «de los de abajo contra los de arriba, de los humildes contra los privilegiados».
En el inicio del acto, la concejal de Barcelona en Comú Janet Sanz ha hecho un llamamiento a los ciudadanos de Nou Barris a no dejar que el 21D se «tiña de naranja» un distrito que tradicionalmente ha sido bastión de la izquierda.