La economista y abogada gallega, Nadia Calviño, el la ministra de Economía en el Ejecutivo del Gobierno de Pedro Sánchez tras doce años al servicio de la Comisión Europea, dónde desde 2014 es directora general de Presupuestos.
Calviño (La Coruña, 1968) ha sido desde 2014 directora general del departamento que se dedica a la programación financiera y la elaboración de los presupuestos anuales y las normas contables y financieras.
En este puesto ha trabajado al flanco del actual comisario, Günther Oettinger, y de su predecesora y actual consejera delegada del Banco Mundial, Kristalina Georgieva, supervisando la actividad de cinco direcciones y 450 empleados.
Deja el cargo en un momento crucial para el departamento, justo cuando empieza la negociación entre los países del marco financiero plurianual para 2021-2027 elaborado por sus servicios y que será el primero post-brexit.
Antes de asumir este puesto, Calviño había sido directora general adjunta en materia de servicios financieros en la Dirección General de Mercado Interior y Servicios de la CE (2010-2014) y ocupado este mismo cargo en Fusiones y Defensa de la Competencia, en la Dirección General de Competencia del Ejecutivo comunitario (2006-2010).
Economista y abogada, y llegó a las instituciones europeas procedente del ministerio de Economía, dónde empezó a trabajar en 1994 y hasta 2006 desempeñó diferentes funciones.
Entre 2004 y 2006 ocupó el cargo de directora general de Competencia tras haber sido, en el mismo departamento, directora adjunta de Fusiones (2001-2004) y del Servicio de Asuntos Legales (2000-2001).
Previamente había sido jefa de gabinete en la secretaria de Estado de Comercio y Turismo, y trabajado en los servicios de análisis macroeconómico y laboral, entre otros.
Licenciada en Economía por la Universidad de Madrid y en Derecho por la UNED, forma parte del Cuerpo Superior de Técnicos Comerciales y Economistas del Estado desde 1994.
Antes de empezar a trabajar para el Estado fue consultora para firmas de abogados y profesora asociada en la Universidad Complutense de Madrid.
Es hija de José María Calviño, director general de RTVE entre 1982 y 1986, con el Gobierno de Felipe González.
Calviño cuenta con la baza de su experiencia en la Unión Europea y en particular en materia de Presupuestos, que le será muy útil a la hora de negociar en los próximos meses el presupuesto plurianual de la UE dónde están en juego los fondos que recibirá España para agricultura, cohesión o empleo.
Juega con la ventaja de que la propuesta ha sido diseñada por el servicio que dirigía hasta hoy y su bagaje en las negociaciones de las cuentas comunitarias.
Llega además en un momento crucial para la eurozona, con los Diecinueve decididos a pactar medidas de reforma en su cumbre de junio tras meses de debate en los que España, con el Gobierno del PP, ha defendido una mayor integración.
La elección de Calviño lanza una señal europeísta a los socios del euro en un momento de incertidumbre por el rumbo que pueda tomar Italia, al tiempo que garantiza que la sustituta de Román Escolano conoce tanto los temas sobre la mesa como las normas de disciplina fiscal que España deberá seguir cumpliendo.