La presidenta del Congreso, Ana Pastor, ha ordenado desalojar de la tribuna de público del hemiciclo a Rosa Hernanz, una enferma de poliomielitis que ha intentado leer un papel con sus reivindicaciones durante el Pleno. Tras el episodio, la ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, se ha acercado para escuchar personalmente los planteamientos de la mujer, con la que ha charlado durante unos minutos.
Hernanz, que se desplaza en silla de ruedas como consecuencia de sus enfermedad, ha esperado a que terminara la primera intervención del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para intentar leer el documento que llevaba, pero no ha podido porque los servicios del Congreso lo han impedido.
Cuando se produce una interrupción desde las tribunas de público, sus protagonistas son desalojados de la Cámara y así lo ordenó la presidenta del Congreso, Ana Pastor, aunque todo transcurrió con más delicadeza de lo habitual. También ha sido diferente que, en esta ocasión, la persona que protestaba captó la atención del ministro correspondiente. Así, Hernanz logró que la escuchara la ministra de Sanidad.
Infancia destrozada
Carcedo, que seguía la sesión desde su escaño en el banco azul, se ha interesado por el asunto y ha salido del Palacio de la Carrera de San Jerónimo para hablar personalmente con Hernanz, quien le ha trasladado todas las peticiones que no ha podido verbalizar en el hemiciclo.
En nombre de los más de 40.000 afectados por la poleo que, según ha dicho, hay en España, ha reclamado que se les reconozca como víctimas de la dictadura, ya que culpan a Franco de haberse negado a vacunarles y a reconocer la epidemia. «Demandamos una compensación por una infancia destrozada», ha dicho.
Pero Hernanz también ha denunciado que los «niños de la polio», que «ya son casi ancianos», han tenido que presentar una querella en Argentina para buscar la Justicia que no encuentran en España. Asimismo, ha explicado que ahora muchos se están viendo afectados ahora por el denominado «síndrome post polio», una enfermedad degenerativa consecuencia de la patología original sobre la que, ha subrayado, «no está contemplada en el sistema sanitario» ni hay facultativos especializados para tratarla.
Carcedo le ha contestado defendiendo la formación de los profesionales de la sanidad pública, recalcando la necesidad de «combatir el negacionismo antivacunas» y sugiriéndole que los afectados pueden solicitar ayudas por medio de la Ley de Dependencia.
De su lado, el portavoz de Sanidad del PSOE en el Congreso, Jesús María Fernández, le ha recordado a Hernanz que su partido ya planteó en la Cámara una debate sobre su situación en 2015. «Pues estamos en 2018», le ha espetado la afectada, ante lo que los socialistas le han recordado que acaban de volver al Gobierno