La dirección del centro penitenciario provincial de El Acebuche, en Almería, ha acordado asignar una interna de acompañamiento a Ana Julia Quezada, autora confesa del asesinato del niño de ocho años Gabriel Cruz, después de que ella intentase autolesionarse con un objeto cortante si bien cuando fue reconocida en la enfermería solo presentaba unos «arañazos en las manos».
Fuentes penitenciarias han indicado que el incidente se produjo el pasado día 31 y que, al parecer, el detonante fue una «información aparecida en un medio de comunicación» que llevó a que Quezada, en prisión provisional, recibiese «algún tipo de reproche» por parte de otra reclusa.
La decisión de asignarle una interna de acompañamiento se ha tomado «pese a que tenemos cierta certeza de que no hay riesgo de suicidio». «Es una prevención porque riesgo como tal no existe», han precisado las citadas fuentes para añadir que no es la «primera vez» que se da esta situación con Ana Julia Quezada ya que le «afecta ver algunas noticias referentes a ella».
Las mismas fuentes han precisado que los «arañazos» que se autoinfligió tenían carácter «muy leve», que no precisaron de atención médica y que, en la actualidad, la situación en el interior del centro penitenciario de la procesada por el crimen de Gabriel Cruz «está del todo normalizada».