La hipoteca para la primera vivienda quedará grabada con el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (AJD), que pagarán los bancos, tal como aprobó ayer el Congreso con el voto de todos los grupos parlamentarios -incluido el PP que había propuesto la eliminación del impuesto- salvo Ciudadanos. El PP había introducido en el Senado, donde tiene mayoría, la enmienda para eliminar el IAJD -que en el pasado pagaban los clientes y que, por decisión del Gobierno, pasó a asumir la banca- pero la modificación debía ser votada de nuevo por el Pleno del Congreso de este jueves.
Finalmente, la enmienda del PP fue rechazada por 302 votos y solo ha cosechado 31 votos a favor, los de C's. Con este trámite, el Congreso aprobó la nueva ley hipotecaria, una de las normas económicas más importantes que ha sacado adelante el Gobierno de Pedro Sánchez, que añade elementos de protección al consumidor y equilibra el reparto de los gastos que conlleva la constitución de un crédito hipotecario entre el banco y el cliente.
En virtud de una de las enmiendas aprobada ayer, finalmente la ley entrará en vigor a los tres meses de su publicación en el BOE. La normativa es el resultado de la transposición de una directiva europea que va con casi tres años de retraso, por la que la Comisión Europea amenazaba a España con una multa de más de 100.000 euros diarios.
El proyecto fue redactado por el exministro de Economía del PP Luis de Guindos para elevar la protección de los consumidores y ve la luz con numerosos cambios incorporados durante el mandato socialista, producto del consenso con los grupos parlamentarios, tal como destacó la ministra de Economía y Empresa, Nadia Calviño. Comenzó su tramitación precisamente hace un año, el 15 de febrero de 2018, con el debate de la enmienda a la totalidad que presentó Unidos Podemos, que ayer consideró que con la Ley se ha producido un nuevo «rescate legislativo» a los bancos.
Los pagos
Además del IAJD, los bancos deberán pagar las primeras copias del notario, los gastos del registro y los de la gestoría, mientras que el cliente abonará las segundas copias del notario y los gastos de tasación.
La norma elimina las cláusulas suelo y es más exigente con el inicio del procedimiento de desahucio, que solo podrá comenzar si hay 12 cuotas impagadas.