La presidenta autonómica y candidata a la reelección, Isabel Díaz Ayuso, ha asegurado este domingo que "hacía muchísimo tiempo" que los madrileños no estaban "tan unidos en torno a un mismo proyecto, que es el de vivir a la madrileña" y defender una comunidad "en la que ricos y pobres nos entendemos en la terraza de un bar".
Acompañada de los miembros de su Gobierno y del PP de Madrid, Ayuso se ha desplazado a Boadilla del Monte para hacer balance de su gestión en los dos años de legislatura, que a su juicio han discurrido "ante numerosas difamaciones, insultos y boicots", con un "maltrato obsesivo" por parte de la Moncloa.
La candidata ha asegurado que "el proyecto liberal es el que está triunfando en Madrid", y ha querido decirle "a la gente de bien" que el "discurso socialista" del PSOE y Unidas Podemos "se está cayendo".
"Defendemos la libertad de los hosteleros, y no de los etarras. La libertad de los comerciantes, y no la de los okupas o de los golpistas", ha dicho la presidenta, al tiempo que ha apuntado que "Madrid, monarquía y España son lo mismo" y "no se pueden disociar".
Ayuso ha subrayado que aspira a levantar la "casa común" del centroderecha "y también de aquella izquierda que ama España, que ama la libertad y que, en los momentos más difíciles de la pandemia, ha agradecido que tratáramos sus intereses y sus vidas como adultos -ha dicho-".
Y ha recalcado que se presenta a las elecciones del 4 de mayo al frente del equipo que ha gestionado la crisis sanitaria en Madrid "y que no deja temporalmente sus ocupaciones nacionales, después de no haber hecho nada, para intentar vender cantos de sirena".
Ayuso ha aprovechado para agradecer el trabajo de los consejeros que han estado "pasando las de Caín" durante la pandemia, y aunque "las encuestas son positivas" para el PP les ha recordado que "hasta el último momento" deben trabajar "como si faltara un escaño" para revalidar el Gobierno.