Un año después de los indultos a los independentistas encarcelados, el líder de ERC, Oriol Junqueras, y dirigentes como Raül Romeva, Carme Forcadell, Dolors Bassa y Marta Rovira han urgido al Estado a una amnistía «integral» que pongan fin a la «represión» y a ser valiente en una mesa de negociación a la que los republicanos no renunciarán. Esquerra ha celebrado en su sede el acto Prou repressió! (¡Basta de represión!), encabezado por los cuatro dirigentes del partido que fueron encarcelados por el Tribunal Supremo y posteriormente indultados por el Gobierno, así como la secretaria general republicana, quien se encuentra en Ginebra (Suiza), huida de la justicia española, y ha participado telemáticamente.
Un acto con presencia de dirigentes destacados como la secretaria general adjunta, Marta Vilalta, el conseller Josep Gonzàlez-Cambray, la exconsellera Meritxell Serret, la vicepresidenta primera del Parlament, Alba Vergés, o el líder del partido en Barcelona, Ernest Maragall, aunque no así el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ausente porque ha encabezado este mediodía la reunión de la Mesa Agraria para aprobar ayudas a afectados por las heladas y ha visitado también la zona afectada por el incendio de Baldomar. «Nuestra propuesta para acabar con la represión es la amnistía. Es la mejor herramienta para superar la represión que se abate sobre nosotros. Y es la mejor herramienta porque depende exclusivamente de la voluntad del poder legislativo y de los partidos que forman parte del Gobierno», ha afirmado Junqueras en un mensaje a PSOE y Podemos.
Para el líder republicano, la amnistía es «la única herramienta que evitará que los tribunales puedan continuar haciendo política al servicio de la extrema derecha y de la derecha cada vez más extrema». Junqueras ha dejado claro que a ERC «no le da ningún miedo» defender sus ideas, ya sea «desde la cárcel, ante el Tribunal Supremo, desde el exilio o en una mesa de negociación», porque los republicanos están «convencidos» de que podrán «convencer» a la otra parte y de que la negociación es la vía para resolver el conflicto.
En un acto en el que se ha hecho referencia a los presos indultados de otros partidos y se ha condenado la situación de «exilio» del expresidente Carles Puigdemont y otros dirigentes de JxCat o de la CUP, la secretaria general de ERC, Marta Rovira, ha recordado que «la represión tiene muy bien calculados los efectos que quiere producir, como la desmovilización» social. «Basta ya de represión política, porque continua siendo instrumento para el Gobierno para hacer política. Con los indultos no acabó nada. Empezó un camino irrenunciable que nos debe llevar a la amnistía», ha señalado Rovira en conexión telemática desde Suiza. Y ha recordado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que «a inicio de legislatura se comprometió a resolver el conflicto» y, por ello, le ha retado a demostrar «si está acomplejado» o bien «tiene suficiente valor para erigirse en alternativa a la derecha más desbocada de Europa».