La ley trans y la reforma del aborto ha superado su examen en el Congreso y ahora seguirá su camino parlamentario que será por la vía de urgencia. Sin embargo, el feminismo se ha mostrado muy dividido ante la aprobación de la ley trans. Una parte del sector defiende que ser mujer no es un sentimiento y rechaza la norma al considerarla «misógina, reaccionaria y sexista». Pero, ¿cuáles son sus claves?
La nueva reforma de la ley de la aborto permitirá que las jóvenes de 16 y 17 años ya no necesiten el permiso paterno para interrumpir su embarazo de forma voluntaria. Además, las mujeres ya no contarán con un límite de tiempo de tres días para reflexionar que decisión quieren tomar. Para todo ello la sanidad pública será la red de referencia para abortar. Los centros de salud serán los encargados de distribuir la píldora del día después de forma gratuita y las píldoras anticonceptivas volverán a estar cubiertas por la Seguridad Social. También se promoverán los métodos anticonceptivos masculinos.
Las reglas dolorosas son otro punto que atañe dicha norma. La ley establece el derecho a la incapacidad laboral temporal por este tipo de menstruación. Todo el coste será asumido desde el primer día por la Seguridad Social. En relación a las escuelas, la educación sexual estará presente de forma obligatoria en todas las etapas educativas desde la primera infancia.
Con la ley trans las personas podrán elegir de forma voluntaria si quieren cambiarse de sexo en el Registro y no tendrán que someterse a informes médicos o psicológicos y de testigos. Solo desde los 14 hasta los 16 años deberán ser asistidos por sus padres o tutores legales para iniciar este proceso. Esta norma también prohíbe las terapias de conversión destinadas a modificar la orientación o la identidad sexual o la expresión de género.
En cuanto a los embarazos garantizará a lesbianas, bisexuales y a las personas trans, con capacidad de gestar, el acceso a técnicas de reproducción asistida. También modificará el Código Civil para que las mujeres lesbianas y bisexuales puedan proceder a la filiación de sus hijos sin necesidad de estar casadas. En el ámbito laboral y en la convocatoria de ayudas y subvenciones de empleo se deberá promover la igualdad y la no discriminación del colectivo LGTBI.