Juan Carlos I celebra este jueves su 85 cumpleaños, edad a la que llega «muy bien física y moralmente», según aseguran personas próximas a él, y que por tercer año consecutivo va a festejar fuera de España tras su marcha a Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos) en agosto de 2020 por la controversia que provocaron sus negocios irregulares en el extranjero. El rey emérito conmemora su aniversario sin pistas de cuándo podría protagonizar su segundo viaje a España tras el que hizo el pasado mes de mayo, que causó malestar en el Gobierno por su comportamiento en los días en los que estuvo en Sanxenxo (Pontevedra) con sus amigos de la vela. Desde su marcha a Abu Dabi hace dos años y medio, don Juan Carlos sólo se ha desplazado en una ocasión a España, entre el 19 y el 23 de mayo, dos meses y medio después de que la Fiscalía del Tribunal Supremo archivara la investigación contra él.
Tras cerrarse la causa, el anterior jefe del Estado expresó su deseo de seguir viviendo en Emiratos Árabes Unidos, donde se aloja en una villa facilitada por las autoridades del país del Golfo Pérsico, y de volver a España «con frecuencia», aunque no hay perspectivas de cuándo podría tener lugar su próximo viaje. «Querer quiere, otra cosa es que pueda. Pero ya ha tenido su pena de telediario y sus penas fiscales. Más no puede hacer», esgrime a EFE uno de las personas con las que mantiene contacto telefónico. Aunque el deseo por regresar a España lo conserva, otras fuentes de su entorno revelan que «está cansado» del trato que algunos le están dando al no valorar su legado de 39 años de reinado.
«Tiene un sentimiento de dolor por que la gente, en la balanza de lo que ha hecho en la vida, sólo mire el platillo de las cosas malas y no el de las cosas buenas», lamenta a EFE uno de los amigos que le ha visitado en varias ocasiones en Abu Dabi. La última vez que se vio a don Juan Carlos fue el pasado 19 de septiembre, cuando asistió en Londres al funeral de Isabel II junto a los reyes Felipe y Letizia y a la reina Sofía. Unos días antes, voló a Ginebra (Suiza) para pasar unos días con la infanta Cristina y apoyarla tras su separación de Iñaki Urdangarin. En su aparición en el Reino Unido, se vio al anterior jefe del Estado con sus habituales problemas de movilidad, aunque las fuentes apuntan que se encuentra «bien» gracias a que se ejercita con regularidad para frenar el deterioro de sus articulaciones y controlar el peso y hace vida al aire libre cuando las condiciones meteorológicas lo permite en un país de intenso calor como Emiratos Árabes Unidos.
«Está mejor que nunca, tanto física como moralmente y con muy buen humor. Se está cuidando mucho», destacan las fuentes. Al buen ánimo del emérito ha contribuido que el tribunal de Londres encargado de estudiar la demanda por acoso presentada por su examante Corinna Larsen haya resuelto que cuenta con inmunidad en relación a hechos previos a su abdicación en 2014. «Él cree que ha salido muy bien parado», apuntan las fuentes sobre la marcha del pleito con Corinna, pendiente aún del fallo definitivo. Juan Carlos I está en permanente contacto con sus amigos a través de llamadas y de mensajes e informado de lo que ocurre en España.
También está al tanto del calendario de regatas previstas en Sanxenxo, que comenzarán a partir de marzo. Es de esperar que Felipe VI telefonee a su padre para felicitarle, como la Casa Real reveló en el cumpleaños de hace dos años. Su presencia en Londres propició la primera imagen de ambos desde que fijó su residencia en Abu Dabi, después de que se encontraran en el Palacio de la Zarzuela en mayo antes de que pusiera fin a su primer viaje a España.