La tasa de inflación anual ha subido dos décimas en febrero, hasta el 6,1 %, debido al alza de la electricidad y los alimentos, según el dato adelantado del índice de precios de consumo (IPC) También se ha elevado dos décimas la tasa anual de la inflación subyacente, hasta el 7,7 %, alcanzando la cifra más alta desde diciembre de 1986, según los indicadores publicados este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
La tasa general encadena así dos subidas consecutivas mientras que en la subyacente -sin energía y alimentos no elaborados- el alza de febrero supone sumar tres subidas. En tasa mensual, los precios de consumo han subido un 1 % en febrero respecto al mes de enero, el mayor aumento del IPC en un mes de febrero en 45 años, desde 1978. Tras la subida de febrero, el INE señala a la electricidad que repunta frente al descenso registrado en febrero de 2022, y al mayor incremento de alimentos y bebidas no alcohólicas pese a la rebaja del IVA aplicada a algunos alimentos básicos.
Por el contrario, se apunta a la bajada de los precios de los carburantes y lubricantes, que aumentaron en febrero de 2022, y del transporte combinado de pasajeros, frente a la estabilidad del año anterior. «Son datos preocupantes porque superan las expectativas que teníamos otra vez (...) las presiones inflacionistas son más intensas de lo esperado y en los alimentos todavía queda por subir», resume a EFE la economista senior de Funcas, María Jesús Fernández.
«El precio de los alimentos en origen sigue subiendo y se han juntado diversos factores que tensan aún más la situación (...) durante los próximos meses seguirán subiendo», asegura Fernández. «El repunte del IPC de los dos últimos meses tras la rápida desaceleración del último trimestre de 2022 está generando dudas sobre la senda de moderación de los precios en España», recoge en un comunicado el jefe de Análisis Económico y Financiero de Ibercaja, Santiago Martínez. «Quedan algunas incógnitas como la evolución del precio de los alimentos, que se han visto influidos por otros factores además del encarecimiento de la electricidad y el transporte: malas cosechas, incremento de precios de materias primas agrícolas, de fertilizantes y piensos», añade. Desde los sindicatos han insistido en la necesidad de subir los salarios.
«El avance de IPC del mes de febrero destaca la ineficiencia de las reducciones de IVA de algunos productos, debido al aumento de los precios por parte de las empresas, y pone de manifiesto la necesidad de subir los salarios de manera inmediata», han reclamado desde UGT. Todos los detalles de evolución de los precios por grupos se conocerán con el dato definitivo que se publicará el próximo 14 de marzo. En cuanto a la tasa armonizada, el IPCA se situó en febrero en el 6,1 %, dos décimas más que en el mes anterior. Por su parte, la variación mensual estimada del IPCA fue del 1 %.
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