La Subdelegación del Gobierno en Teruel tenía previsto celebrar el próximo lunes, 7 de octubre, un homenaje a los dos pilotos fallecidos en un accidente de un F-4 que tuvo lugar en Peralejos en 1984, precisamente el mismo pueblo en el que este viernes ha muerto el teniente coronel Pablo Estrada al estrellarse el F-18 que pilotaba.
Sobre las 13.30 horas del 4 de mayo de 1984 un avión F-4 Phantom II, de la misma Ala-12 a la que pertenecía el caza accidentado este viernes, se estrelló también en Peralejos causando la muerte de sus dos ocupantes, los capitanes de aviación José Manuel Hernández y Gonzalo García.
El homenaje estaba previsto en el lugar exacto donde se produjo el accidente, donde se erigió un monumento, sufragado por el Ejército del Aire y por el municipio.
En él se recuerda que los habitantes del pueblo colaboraron en las tareas de rescate. Peralejos es una localidad de unos noventa habitantes ubicada a 18 kilómetros al norte de Teruel capital.