El área metropolitana de Barcelona se encuentra este lunes en alerta roja. Las lluvias torrenciales están sembrando un auténtico caos: carreteras inundadas, se ha cortado el servicio de trenes y en el aeropuerto hay numerosos desvíos y cancelaciones. Cabe destacar que la Generalitat ha enviado una alerta a los teléfonos móviles por las intensas precipitaciones, que ya han dejado más de 150 litros de agua por metro cuadrado en varias zonas. Además, los Mossos han pedido evitar desplazamientos y la Universidad Pompeu Fabra ha suspendido las clases.
El portavoz adjunto de la delegación territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Baleares, Bernat Amengual, ha precisado que se trata de los restos de la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) y ha descartado que estas intensas precipitaciones pueden desplazarse hacia Mallorca. Sí ha llegado una vaguada que provocará tiempo inestable, especialmente, desde el miércoles.
Los Mossos d'Esquadra están controlando los puntos donde el Servei Català de Trànsit (SCT) ha cortado varias carreteras de Cataluña para evitar el paso de personas y vehículos en zonas no seguras y han pedido a la ciudadanía evitar desplazamientos innecesarios. Entre otras, están cortadas por inundaciones la A-27 en Valls (Tarragona); la C-32 en Castelldefels-Sant Boi (Barcelona); la C-31B en Salou (Tarragona); la TV-3454 en Deltebre (Tarragona), y un camino asfaltado en Vallirana (Barcelona). También se ha cortado el acceso C-58/C-55 en Castellbell i el Vilar (Tarragona), y la C-233 en Flix (Tarragona). Además, hay afectaciones por restricciones de movilidad en la AP-7 en Altafulla (Tarragona), en sentido sur; en la AP-7 en L'Aldea (Tarragona), en sentido norte; en la C-32 en Sant Pere de Ribes (Tarragona), en sentido sur; y en la AP-2 en Montblanc (Tarragona), en sentido Tarragona.
El Metro también se está viendo afectado. En concreto, en la L3 los trenes no hacen parada en la estación de Liceu y se ha reabierto el acceso por la avenida Paral·lel en la estación de Espanya tras haberlo cerrado por riesgo de inundación; en la L9 Sud, los trenes no paran en la estación de Parc Logístic. Las lluvias también han obligado a cerrar varias entradas a estaciones de las líneas L1, L2 y L5, que sobre las 12.30 horas ya se han podido reabrir a los usuarios del Metro.
Las lluvias torrenciales también están ocasionando incidencias destacables en el Aeropuerto de Barcelona-El Prat. Hasta mediodía se han cancelado unos 50 vuelos vuelos de salida y se han desviado otros 17. Además, se han producido algunas inundaciones en los vestíbulos de la T-1 y en el aparcamiento. La comarca del Baix Llobregat, donde se encuentra el aeropuerto, ha sido una de las más castigadas por las fuertes lluvias durante esta mañana, que han llevado además a las autoridades a suspender todo el servicio ferroviario de Rodalies. Desde Aena han precisado que el aeropuerto de Palma no se está viendo afectado por estas incidencias.
Clases suspendidas
Por su parte, la Universitat Pompeu Fabra (UPF) de Barcelona ha suspendido la actividad académica a partir de las 13:00 horas en todos sus campus a causa del aviso de lluvias por parte de Protección Civil. Según ha informado la universidad, el centro ha pedido a la comunidad de la UPF que no se desplace hasta que haya acabado la alerta. La UPF ha subrayado que es necesario reducir al máximo la movilidad durante la vigencia de la alerta meteorológica.
A diferencia de los alumnos de las comarcas de Tarragona, que se han quedado en casa por la alerta que activó ayer la Generalitat, Protección Civil ha pedido este 4 de noviembre a los padres de los alumnos de las zonas afectadas por el temporal que no fueran a recogerlos al colegio, dado que bajo las lluvias torrenciales los centros educativos eran el lugar más seguro.
Más de 100 litros en varias zonas
Las precipitaciones están siendo muy intensas y hasta las 12:30 horas de este lunes se han registrado 150 litros de agua por metro cuadrado en el aeropuerto de Barcelona.