El Gobierno está considerando eliminar la posibilidad de que los funcionarios puedan elegir cada año entre acudir a la Seguridad Social o a Muface para recibir atención sanitaria con el objetivo de facilitar «la planificación de los ingresos» del sistema y su «sostenibilidad».
Según han informado a EFE fuentes del Ministerio para la Función Pública, en el marco de las nuevas condiciones en las que trabajan para volver a licitar el contrato de Muface «podría abordarse la voluntariedad del modelo, que supondría que los empleados públicos ahora cubiertos por el mutualismo puedan elegir estar en el régimen común o en el especial, de una vez y para siempre».
Esta reflexión surge después de que quedara desierto el concurso de Muface para los dos próximos años al entender las aseguradoras que lo prestaban que la subida del 17,12 % propuesta por el Gobierno no era suficiente.
Y esto unido a que, los nuevos mutualistas «se inclinan cada vez más» por acudir a la sanidad pública, hace que el Ejecutivo considere que «es el momento de abrir una reflexión sobre el modelo del mutualismo», que se base en tres principios: transparencia, equidad y sostenibilidad. Mientras tanto, los beneficiarios de Muface tienen la asistencia sanitaria asegurada hasta el 31 de enero, así que hay plazo suficiente para poner en marcha la segunda licitación, añade el Ministerio.
En todo caso, recuerda, en la Ley de Contratos del Sector Público existen mecanismos que garantizan la asistencia en las mismas condiciones hasta que el concierto vencido sea remplazado por otro. Para sustentar este proceso de reflexión, añaden, será importante conocer las conclusiones del próximo informe de la AIReF.