La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, ha descartado la posibilidad de elecciones anticipadas, como ha pedido el barón socialista Emiliano García Page o el expresidente de Aragón Javier Lambán, y ha reclamado al PSOE «poner la directa» para aplicar un «giro social» al segundo tramo de la legislatura.
De hecho, ha argumentado que es posible aplicar avances sociales sin tener nuevos Presupuestos Generales del Estado (PGE), como ha pasado en el primer tramo del mandato del Gobierno. Y ha reivindicado que la clave para ello es tener «voluntad política».
«Le voy a dar una mala noticia a la oposición de nuestro país y es que hay Gobierno de coalición para rato», ha proclamado en declaraciones a La Sexta, recogidas por Europa Press, para añadir que no comparte «en absoluto» la reflexión de Lambán al pedir comicios anticipados.
Díaz ha apelado al PSOE a volcarse en ese giro social y ha apuntado que tienen retos esenciales como aprobar la reducción de la jornada laboral, arreglar el «problema» de la vivienda o aplicar permisos retribuidos y prestaciones para cumplir la directiva europea de conciliación, que le cuesta a España sanciones económicas por parte de la UE.
Díaz enfatizado que el Gobierno tiene que separarse del «fango y el ruido», regenerar la vida política española, para defender que el Gobierno está haciendo mucho para mejorar la vida de los ciudadanos. Y ha recalcado que se puede gobernar sin nuevos Presupuestos Generales, como han demostrado ya.
La vicepresidenta segunda también ha mostrado su oposición a que se suba un 5 % sobre el PIB del presupuesto en defensa, una vez que Estados Unidos ha demandado a los países de la OTAN que lleguen a ese volumen de gasto militar.
En este sentido, ha desgranado que Sumar apuesta por una estrategia autónoma en materia de seguridad, pero rechaza el plan de rearme que propone por ejemplo la Comisión Europea, al considerar que con ello no se arregla los conflictos bélicos que existen en la actualidad.
También ha justificado su negativa al replicar que esa petición de llegar al 5% del PIB en gasto en defensa no se puede hacer sin comprar armamento a EEUU y que esa demanda es una pretensión que quiere el presidente norteamericano, Donald Trump, para compensar el déficit comercial de su país con compras a la industria militar. «Le haríamos un favor a Trump», ha remachado.
Luego, ha dicho que le consta que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, está defendiendo los intereses del país a nivel internacional y peleando para ello, por ejemplo, de cara a la cumbre de la OTAN. En el plano internacional, ha vuelto a reclamar que se retire a la embajadora española en Tel Aviv y se ha mostrado a favor de suspender relaciones diplomáticas y comerciales con Israel, ante el «genocidio» que está perpetrando contra el pueblo palestino.
Ya no hacemos cosas chulísimas, solo estrambóticas, pero mi vida sí es chulísima, la voy a estirar todo lo que de, y cuando se acabe me pillo un cohete.