Vox ha vuelto a relacionar la inseguridad con la inmigración, esta vez al proponer un refuerzo de la presencia policial en las fiestas populares que se celebran en verano, cuya seguridad cree amenazada por la «inmigración masiva y descontrolada».
En una proposición no de ley registrada en el Congreso, Vox afirma que el verano «concentra la mayor llegada de inmigrantes ilegales del año» y que las fiestas populares congregan a miles de personas en espacios públicos, lo que «exige una respuesta proporcional del Estado».
Tras pedir en los dos primeros puntos de la iniciativa que se incremente el número de efectivos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y que se les dote de los medios materiales, humanos y económicos necesarios, el texto reitera todos los postulados de Vox en esta materia, desde el rechazo a la «política de puertas abiertas» a la deportación, pasando por el cierre de mezquitas.
En una rueda de prensa en la que ha anunciado esta iniciativa, la portavoz de Vox en el Congreso, Pepa Millán, ha criticado que el «pacto migratorio del bipartidismo» ha llevado a «regularizaciones masivas y fronteras de mentira» y «pone en peligro» la «seguridad e identidad» de España.