La Unidad de Neurobiología Molecular del área de Enfermedades Neurodegenerativas del Centro de Investigación Biomédica de La Rioja (CIBIR) ha desarrollado una terapia génica con el objetivo de ralentizar la progresión de la enfermedad del Párkinson.
La consejera de Salud de esta comunidad, María Martín, junto al director gerente de la Fundación Rioja Salud, Javier Aparicio; el coordinador de investigación del CIBIR, Eduardo Mirpuri; y el presidente de la Asociación Riojana de Enfermos de Párkinson (AREPAK), Roberto Moreno, ha presentado ese lunes la iniciativa, con motivo del Día Mundial del Párkinson.
El grupo de investigación, liderado por Lydia Álvarez-Erviti, basa su actividad en el estudio de los posibles mecanismos implicados en el origen y en la progresión de esta enfermedad.
Actualmente, la unidad de Neurobiología Molecular desarrolla dos líneas de investigación. La primera de ellas, financiada por Parkinson's UK, despliega una nueva terapia génica para poder administrarla por vía intravenosa con el objetivo de ralentizar la progresión de la enfermedad.
Por su parte, la segunda línea de investigación, financiada por el Instituto de la Salud Carlos III, se centra en descubrir dianas potenciales para poder desarrollar nuevos tratamientos.
Ambas líneas se encuentran a la vanguardia en la investigación de la enfermedad, cuyos resultados más novedosos se ofrecieron en la Conferencia Internacional sobre el Alzheimer y Parkinson, celebrada recientemente en Viena. María Izco, investigadora postdoctoral de la unidad de Neurobiología Molecular, asistió en representación del CIBIR.
La conferencia reunió a expertos a nivel mundial con el objetivo de atraer a profesionales médicos y científicos internacionales de todo el mundo para desentrañar los mecanismos de la enfermedad del Parkinson, Alzheimer y otras enfermedades neurodegenerativas.
Los investigadores destacaron que actualmente los esfuerzos se centran en el estudio de patrones y mecanismos de origen y progresión de la enfermedad de Párkinson, con especial énfasis en el papel de la proteína alfa-sinucleina, biomolécula vinculada a la enfermedad de Párkinson.
El desarrollo de la investigación mundial se encuentra enmarcada en los mismos modelos que sigue la investigación que se ha desarrollado en el CIBIR.
Pacientes y modelos animales
Para llevar a cabo sus estudios, la Unidad de Neurobiología Molecular del CIBIR emplea muestras de pacientes, líneas celulares en el laboratorio y modelos animales de la enfermedad de Parkinson. Tanto los modelos celulares como animales se utilizan para investigar y entender los mecanismos implicados en el origen y la progresión de la enfermedad y testar nuevas terapias centradas en la proteína alfa-sinucleina.
El grupo perteneciente al área de Enfermedades Neurodegenerativas mantiene también colaboraciones a nivel nacional e internacional, entre las que destacan el departamento Neurociencias Clínicas de la University College de Londres, el departamento de Farmacología y Toxicología de la Universidad de Navarra y Plamidfactory, empresa biofarmacéutica alemana.
El Párkinson es la segunda enfermedad neurodegenerativa más frecuente en el mundo después del Alzheimer. Durante su curso evolutivo, hasta un tercio de pacientes presentan deterioro cognitivo y demencia. La prevalencia de la enfermedad es del 2% en mayores de 65 años y alcanza el 4,5% en los mayores de 85 años.
De las enfermedades crónicas causantes de discapacidad, el conjunto de las enfermedades neurológicas son la principal causa de discapacidad en los mayores de 80 años (62,2%) y la primera también entre 65 y 79 años (43,89%).
De las enfermedades neurológicas diagnosticadas a personas con discapacidad, Alzheimer y Párkinson, junto a las enfermedades cerebrovasculares, son las primeras en causar discapacidad entre los mayores 65 años.