La Inspección de Trabajo de Barcelona ha dado la razón a una demanda interpuesta por el sindicato Comisiones Obreras contra Burger King, en la que denunciaba que la política de vestimenta de la empresa obliga a los hombres a llevar corbata y afeitarse, y a las mujeres a vestir un lazo.
El sindicato había pedido anteriormente a la compañía que rectificara su normativa interna, al considerar que «atentaba contra la dignidad» de los empleados, y ante la negativa de la empresa por considerarla «una normativa intocable», acudieron a la Inspección de Trabajo, ha informado un comunicado.
En su resolución, la Inspección de Trabajo ha argumentado que, el hecho de obligar a los hombres a afeitarse y no llevar barba, ni bigote «atenta contra el derecho a la propia imagen» y considera que hay otros medios más moderados para que la higiene alimentaria quede asegurada, como protectores de barba.
La Inspección de Trabajo también ha criticado la imposición de la corbata a los hombres y del lazo a las mujeres sin posibilidad de que las empleadas puedan vestir corbata como alternativa y viceversa, una medida «sin justificación objetiva».
El sindicato, que ha considerado muy positiva la resolución del ente, espera que la empresa rectifique ahora su política de vestimenta y que las conclusiones de la Inspección de Trabajo se puedan extrapolar a otras empresas del sector de la hostelería bajo condiciones similares.